El expresidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, se encuentra residiendo en México desde el pasado 26 de noviembre, bajo la condición de asilado político, por lo que las autoridades salvadoreñas poco o nada pueden hacer para presentarlo ante a la justicia salvadoreña donde se le acusa de lavado de dinero y estafa.
La oficina central de Interpol de El Salvador pidió el pasado viernes 6 de marzo, por correo electrónico a sus homólogos en México, proporcionara la dirección de residencia del prófugo salvadoreño, y en respuesta obtuvieron que dichos datos no podrían ser revelados por la condición de asilado político de la que goza Reyes.
“Estimado colegas: En el marco de la ayuda mutua internacional en materia policial, por este medio muy respetuosamente solicitamos nos puedan proporcionar la dirección exacta de residencia en ese país del fugitivo Othón Sigfrido Reyes Morales”, pidió Interpol El Salvador, según una investigación del periódico El Faro.
Ese mismo día, la respuesta desde México fue que Reyes está protegido por la Ley de Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político, que no permite brindar ningún tipo de datos de la persona solicitada.
El exdiputado del FMLN arribó a México procedente de Panamá el 26 de noviembre, esquivando una orden de captura girada en su contra por el Tribunal Quinto de Instrucción de San Salvador.
La ruta de Reyes revelada por el ministro de Justicia Rogelio Rivas, establece que este salió de El Salvador hacia Guatemala, luego a México y de ahí a Francia donde se le perdió la pista, y se llegó a especular que estaría residiendo en Rusia, donde vivió asilado durante el conflicto armado.
Según la Fiscalía Reyes lavó $781,000.
Por su parte, Reyes se considera inocente de las acusaciones y dice que todo ha sido un montaje para perjudicarlo políticamente. “La brutal persecusión desatada por la FGR contra mi persona y otras personas inocentes, es una clásica aplicación de la judicialización de la política, como se vive también en Ecuador, Brasil y otros países. Son acusaciones prefabricadas, por delitos inexistentes, sin prueba alguna!”, escribió Reyes en su cuenta de Twitter.
Si y claro a igual que a Fuenes le siguiràn colgando muchos mas delitos fabricados y sin pruebas, la persecuciòn politica en El Salvador es criminal ya que en ningun otro pais se permite que criminales sean utilisados criteriadamente!