En 2007,Megan Fox se llevó el “honor” de ser la personada más buscada en Google al tiempo que las revistas la elegían como la mujer más atractiva del mundo. La actriz tenía 21 años y apenas había hecho nada en el cine hasta que Michael Bay la eligió para protagonizar “Transformers”, la película que la catapultaría a la fama pese a que su papel no era más que una comparsa para el protagonista,Shia LaBeouf.
No era, todavía, el momento de las mujeres empoderadas en los “blockbusters” de Hollywood y Megan Fox se tuvo que conformar con enseñar más que actuar en una película con tanta testosterona como explosiones. Aún así, la joven logró trascender la idea de “sex symbol” para continuar su carrera en el cine. Una carrera que, por otra parte, jamás despegó.
Desde aquel 2007 en el que fue la reina de Hollywood, su carrera no ha alzado el vuelo, y eso que protagonizó en 2009 “Jennifer’s Body”, un filme que hoy es de culto pero que la crítica destrozó. Y desde ahí, para abajo. “Jonah Hex” (2010), y que le valió su primera nominación a los Razzie; “Passion Play”, que tampoco vio nadie ni siquiera en EE.UU.; un par de cameos en títulos menores como“Si fuera fácil” y “El dictador”, ambas en 2012. Desde entonces hasta 2019, en esos siete años, solo ha trabajado en lafallida franquicia de Las Tortugas y por la que volvió a ser nominada a un Razzie. Una carrera desastrosa, sin más eufemismos.
Durante su declive profesional, eso sí, la prensa del corazón la utilizaba como carne de cañón para rellenar titulares acerca de la identidad desconocida del padre de su hijo, entre otros “escándalos” rosas.
Habrá que ver si este añoMegan Fox remonta. De momento, está a la espera de estrenar “Zeroville”, dirigida por James Franco sobre un joven actor que llega a Hollywood y acabadestruido por las drogas y el alcohol. También la veremos en una producción coreana titulada “Jangsa-ri 9.15”, en la que da vida a la la periodista estadounidense Marguerite Higgins, jefa del departamento japonés del New York Herald Tribune cuando estalló la Guerra de Corea y ganadora del premio Pulitzer en 1951. Una película en la que veremos a una Megan Fox totalmente irreconocible, tal y como se puede comprobar en la foto del rodaje.
Habrá que ver si sus compañeros de estas últimas películas repiten lo que escribieron de ella sus colegas de Transformers: “Megan es una chica desagradecida, sin clase, sin gracia y una antipática.Es muy triste cómo la fama puede cambiar a las personas, y más aún que sea el ídolo de chicas jóvenes. Si sólo supieran a quién admiran…”.