Los Angeles Lakers empiezan el nuevo curso de la NBA con mal pie. Cayeron en un Staples Center a rebosar de forma clara y sorprendente por 114-121 ante unos Golden State Warriors que presumieron de fondo de armario y no necesitaron los triples de Stephen Curry para ganar.
Junto a Curry otros cinco jugadores, incluidos tres reservas, concluyeron el partido con números de dos dígitos, mientras que el escolta Jordan Poole, que se ha convertido en la nueva revelación de los Warriors, llegó a los 20 puntos como segundo máximo encestador.
El ala-pívot reserva, el serbio Nemanja Bjelica, que salió de reserva, surgió como sexto jugador y factor sorpresa ganador al conseguir un doble-doble de 15 puntos, 11 rebotes y cuatro asistencias. El alero mexicano Juan Toscano-Anderson disputó 12 minutos y fue otro de los jugadores decisivos al aportar seis puntos tras anotar 2 de 3 tiros de campo, incluidos un triple de dos intentos, capturó tres rebotes defensivos y dio una asistencia.
Por su parte, los Lakers tuvieron a LeBron James como su líder que aportó un doble-doble de 34 puntos, 11 rebotes y cinco asistencias. El pívot Anthony Davis también consiguió otro doble-doble de 33 puntos, 11 rebotes, dos asistencias y dos tapones, pero el base Russell Westbrook, en su debut con los Lakers, apenas consiguió ocho tantos tras anotar 4 de 13 tiros de campo, capturó cinco rebotes y dio cuatro asistencias.