Además de barrer la entrada de la casa de adentro hacia afuera, usar calzones rojos y comer 12 uvas, existen muchas más tradiciones para recibir el Año Nuevo, y una de las más antiguas es comer lentejas.
Aunque en México no es una de las tradiciones más comunes, muchas familias sirven un plato de lentejas durante la cena de Año Nuevo, ya que es un símbolo de prosperidad, ¿pero de dónde viene esa costumbre? Aquí se lo contamos.
La antigua Roma
La lenteja es uno de los primeros productos que cultivó el ser humano en toda la historia, y por esa razón eran muy apreciadas en culturas como la griega y la romana.
Además, debido a su forma redonda y aplastada, eran relacionadas con las monedas, por lo que también se convirtieron en un símbolo de dinero y, por lo tanto, de prosperidad.
Así, en la antigua Roma existía la costumbre de regalar un puñado de lentejas dentro de un bolso de cuero como forma de desear al otro un año próspero, por lo que muchas personas usaban ese obsequio a manera de amuleto.
Con el tiempo, se generó la costumbre de cocinar las lentejas acompañadas con algunos embutidos, convirtiéndose en algo muy popular en Italia durante la Edad Media.
Ese platillo se servía durante el almuerzo, pero hoy muchas familias italianas sirven las lentejas como plato principal de la cena de Año Nuevo (la Notte di Capodanno) ya que se supone que dan buena suerte siempre y cuando sea lo último que se come en el año viejo y lo primero del nuevo año.
Su llegada a América
Muchos italianos migraron a América, especialmente a partir del siglo XIX, por lo que esta costumbre de Año Nuevo se extendió a diversas naciones latinoamericanas.
En México, por ejemplo, hay quien recomienda agregar a las lentejas algunas rodajas de plátano, para simular monedas. También hay quien tiene la costumbre de arrojar un puñado de lentejas en su casa o en su lugar de trabajo con el fin de que no falte el dinero todo el año.
Ninguna festividad tiene tantas costumbres en el mundo como el Año Nuevo, y este es el origen de una de ellas. Feliz Año.