La Policía Nacional Civil (PNC) desmanteló este viernes un campamento de mareros en lo profundo de un bosque de manglar en la costa de Usulután, donde se realizaban tratamientos de salud para recuperarse de posibles heridas de bala.
La policía afirmó que el sitio era ocupado por pandilleros de la 18 «encontrando evidencias de reuniones y posible lugar de recuperación de delincuentes lesionados», dijo esta tarde.
En el lugar se encontraron catéteres y bolsas de suero intravenoso, así como limpiadores y aceites para armas de fuego.
Posterior al hallazgo equipos policiales especializados rastrearon la zona con drones a fin de encontrar a los posibles ocupantes. De igual forma, se montó un operativo policial terrestre con el mismo fin.
«Mantenemos constantes incursiones tácticas en las zonas de los manglares, por ser lugares elegidos por pandilleros para ocultarse de las autoridades, seguiremos el combate frontal contra la delincuencia», sostuvo la corporación policial.
Y que pasó con la captura de los delincuentes pues?