El 28 de abril del 2021, Óscar Ovidio Miranda Navas, de 32 años citó a su pareja, quien se encontraba en estado de embarazo, para que se encontraran por la noche en una zona rural de San José Guayabal, de Cuscatlán.
La víctima declaró que al llegar al lugar acordado sintió temor por su vida cuando al observar a su pareja que tenía un corvo en la mano, minutos después la atacó causándole graves heridas en cuello y rostro.
La ofendida relató que para salvar su vida se hizo la muerta para evitar que Óscar ya no la hiriera, ni la golpeara.
El sujeto creyéndola sin vida la dejó en un zacatal y huyó del lugar, pero la joven herida logró llegar a una casa cercana donde pidió auxilio y fue llevada por una patrulla de la PNC hasta Fosalud de San Martín.
Debido a la gravedad de las lesiones fue ingresada en cuidados intensivos del Hospital Nacional Rosales, donde logró sobrevivir para narrar los hechos.
Por este caso el Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia y Discriminación para las Mujeres de San Salvador condenó a Miranda Navas a 17 años con seis meses de cárcel, por el feminicidio agravado tentado, en perjuicio de la víctima R.M.M.
Para la jueza se logró establecer la misoginia en el sentido que el sujeto atacó con la finalidad de acabar con la vida de la víctima y con el producto de su embarazo; además, la víctima dio un relato lógico coherente e identificó a su agresor.