La cantante Taylor Swift, la flamante ‘persona del año’ para la revista Time, ha aprovechado su conversación con la cabecera para revelar detalles muy jugosos sobre su mediática relación con el jugador de fútbol americano Travis Kelce. De hecho, la estrella de la música ha contado cómo se las arreglaron para consolidar su noviazgo, lejos de miradas indiscretas, durante «meses».
Ciertos fans asumen que su primera cita tuvo lugar el 24 de septiembre, el mismo día en que Taylor fue avistada en las gradas del estadio donde Kelce disputaba un partido con su equipo, los Kansas City Chiefs. Pero la propia intérprete se ha encargado personalmente de desmontar esa teoría. «Ya éramos pareja cuando fui a verle a ese primer partido», ha señalado.
«Creo que algunas personas siguen pensando que esa fue nuestra primera cita. Nunca seríamos tan psicóticos como para hacer eso en una primera cita», ha añadido sobre lo descabellado de esas conjeturas. «Todo comenzó cuando Travis, de forma adorable, me expuso una vez en su podcast, lo que me pareció increíble», ha añadido para situar su primera toma de contacto el pasado verano.
La artista recuerda con alivio que ambos pudieron disfrutar al máximo de esa primera y «significativa» etapa sin escrutinio de ningún tipo. La situación que vive ahora la pareja es radicalmente diferente, ya que los fotógrafos y sus respectivos fans están al acecho y siguen con atención cualquiera de sus movimientos. «Hubo un período muy significativo de tiempo en el que nadie lo sabía. Y me siento agradecida por ello, pues así pudimos conocernos a fondo», ha indicado.
Taylor Swift ya no tiene reparo en presumir del carácter «público» de su historia de amor con Travis Kelce. La diva del pop y el astro del deporte no están dispuestos a esconderse de los curiosos, y tampoco a tener que complicarse la vida ingeniándoselas para verse furtivamente.
«Cuando se dice que una relación es pública, eso significa que iré a verle hacer lo que le gusta. Queremos estar presentes en la vida del otro. Hay más personas ahí, pero no nos importa. Lo contrario sería esforzarnos hasta el extremo para asegurarnos de que nadie nos ve. Y estamos demasiado orgullosos el uno del otro como para llegar a eso», ha reivindicado.