La actriz y cantante Miley Cyrus decidió ser sincera y platicó con el comunicador Joe Rogen sobre su futuro y los problemas que la hicieron una de las estrellas más polémicas del mundo del espectáculo, incluido el escándalo de su divorcio con el actor Liam Hemsworth.
Cyrus, quien está por cumplir 28 años de edad, fue la invitada del popular programa Joe Rogen Experience, en donde el conductor dejó fluir la conversación mientras pausaba en los puntos clave de la vida de la cantante. Cyrus fue muy abierta y sincera a la hora de responder y no se negó a tocar temas como su adicción con las drogas y el alcohol, ante el cual la cantante dijo lo siguiente:
«Yo llevo mi propio ritmo de vida, el alcohol no siempre fue un problema para mi, yo estaba metida en otras cosas. Ahora nada, y no tengo interés en beber ni en fumar (mariguana)».
Y es que la cantante pasó por un problema con sus cuerdas vocales, lo que le causó que padeciera de una amigdalitis muy severa y fue la causa de que se tuviera que someter a una cirugía, lo que la dejó sin voz temporalmente. Sin embargo, Cyrus dijo que después del procedimiento, ya no sintió la necesidad de beber ni de drogarse, por lo que ha estado “limpia” por más de 10 meses.
Yo puedo sentir la necesidad y puedo festejar con alguna bebida o algo por el estilo, pero no lo hago. Prefiero seguir limpia por que es un propósito que me puse
También dijo que está enfocada en su sueño de hacer libros para niños, entre los que lleva la idea de intentar tocar el tema de las drogas para que puedan saber qué pasa con ellas y cuáles son sus efectos, pues sabe que es un tema tabú para los jóvenes pero que es una de las experiencias que más les pueden ayudar para crecer según su propio aprendizaje.
Sobre su antigua relación con el actor Liam Hemsworth, sintió que los medios tergiversaron lo que pasó entre los dos y el cómo se llevó a cabo la ruptura entre ambos.
«Me sentí como la villana, y me representaron como la persona que tiene la culpa de las desgracias ajenas cuando no era así. Nadie me conoce ni sabe cómo llevo las cosas. No se trata de él o de mí, se trata de que eramos una pareja que se amaba con mucha intensidad y que ocho meses después descubrimos que no nos amábamos tanto como pensábamos»
Además dijo que se sintió completamente apabullada por lo que muchas personas piensan de ella, muchas veces por culpa de los medios pero otras porque los prejuicios pueden más para las personas que la razón misma:
«No me molesta la prensa, me molestan las personas que se dejan influenciar por ellos. Hay veces en las que me encuentro con personas, platicamos un poco y sueltan una expresión como ‘¡diablos, pensé que estabas más loca pero resulta que no!’. Pues claro que no, no soy así»
Sobre sus problemas con la voz, la cantante dijo que se debe a que muchas veces, al terminar un espectáculo, las presiones pueden de más y eso le causaba episodios de mucha energía, por lo que no podía evitar no poder dormir y se quedaba platicando, bebiendo y fumando con algunos amigos, lo que con el paso del tiempo y con el desgaste tan duro de su carrera, terminó afectando su voz. Pero aseguró que fue gracias a eso que aprendió a utilizar su voz no como herramienta de canto sino como parte de si misma.
«Yo había usado mi voz para dejar de cantar a los 15 años, no porque yo lo decidiera, así me llevaron. Fue cuando les dije que quería seguir haciendo esto para el resto de mi vida que ya me empezaron a moderar. (…) Todo es un proceso, no es sólo no dormir sino significa que fuiste a beber y si bebes pues puedes fumar, entonces la voz guarda todos esos problemas, queda como un registro».
Por último la cantante aceptó que tiene una tendencia a no ver lo positivo de lo relacionado con ella, sino que se enfoca meramente en lo negativo, aunque no supo describir porque tiene una costumbre así, sí dijo que eso la ha llevado a tener una visión más competitiva, lo que no es sano pues esa fue una de las causas de que cayera en crisis.