Fueron meses agitados para la industria de Hollywood. La huelga de actores hizo posible un paro total de labores, con miles de trabajadores uniéndose a la fila de piquetes, dando forma a una serie de protestas con el objetivo de hacer valer sus derechos por encima de los intereses de los grandes estudios de la industria. El conflicto terminó el pasado 9 de noviembre y desde entonces se ha marchado de manera segura a un acuerdo satisfactorio para el gremio. Ahora, de acuerdo con nueva información de Deadline, los miembros del sindicato han votado para establecer y ratificar un nuevo contrato con la AMPTP (Alianza de Productores de Cine y Televisión).
El 14 de noviembre fue cuando se abrieron las votaciones para dar paso a un contrato de 3 años en el que se veían cumplidas las demandas de SAG-AFTRA. El sindicato reveló que el 78.33% de los integrantes han votado a favor de un nuevo acuerdo, un número alto en comparación a lo que se esperaba, en especial con el trato hacia temas como el uso de inteligencia artificial en muchos escenarios de la industria. El contrato será de tres años y de manera oficial termina con la huelga que por tanto tiempo estuvo en boga.
Deadline también informa que el contrato expirará el 30 de junio de 2026, además, sostiene que el número de votación es superior a los alcanzados en años previos, cuando fue necesario llegar a un nuevo acuerdo y términos. En 2020, el último contrato recibió 74% de aprobación, mientras que en 2017 fue de 76%. Fran Drescher, presidenta del sindicato, emitió un comunicado sobre la situación actual:
Estoy orgullosa de nuestra membresía SAG-AFTRA. Hicieron huelga durante 118 días para otorgar al Comité de Negociación de Televisión y Teatro la influencia necesaria para asegurar más de mil millones de dólares en ganancias, junto con las primeras protecciones del sindicato en torno a la tecnología de inteligencia artificial. Ahora han asegurado las ganancias al ratificar el contrato. Los miembros de SAG-AFTRA se han mantenido increíblemente comprometidos durante todo este proceso y sé que continuarán abogando durante nuestro próximo ciclo de negociación. Esta es una época dorada para SAG-AFTRA y nuestra unión nunca ha sido más poderosa.
Los milagros de un sindicato
SAG-AFTRA, que significa Screen Actors Guild-American Federation of Television and Radio Artists, es un sindicato estadounidense que representa a profesionales de la industria del entretenimiento, incluyendo actores, locutores, artistas de doblaje, periodistas y otros artistas en los medios de comunicación. Se formó en 2012 a través de la fusión de dos sindicatos preexistentes: el Screen Actors Guild (SAG) y la American Federation of Television and Radio Artists (AFTRA). La unión tiene como objetivo principal proteger y promover los intereses laborales y profesionales de sus miembros, negociando acuerdos salariales, condiciones de trabajo y beneficios, así como proporcionando servicios y recursos para mejorar las condiciones laborales de los artistas en la industria del entretenimiento.
SAG-AFTRA desempeña un papel crucial en la negociación de contratos con los empleadores de la industria del entretenimiento, estableciendo estándares para salarios, condiciones de trabajo y beneficios para sus miembros. Además, la unión trabaja para asegurar que los artistas reciban regalías y compensaciones justas por el uso de su trabajo en diversas plataformas, como cine, televisión, radio e Internet. Además de su función de negociación, SAG-AFTRA también se dedica a la promoción de la seguridad laboral, la igualdad de oportunidades y la defensa de los derechos de propiedad intelectual en el campo del entretenimiento.
La creciente integración de la inteligencia artificial (IA) en la industria de Hollywood plantea desafíos y preocupaciones significativas. Uno de los principales impactos negativos es el riesgo de la automatización de ciertos trabajos creativos y técnicos. La IA, con sus capacidades para el aprendizaje automático y la generación de contenido, podría amenazar empleos en áreas como la edición de video, diseño de efectos visuales y hasta la creación de guiones, lo que podría tener un impacto en la diversidad creativa y en la calidad artística de las producciones cinematográficas. Además, la implementación de IA en la toma de decisiones financieras y estratégicas podría llevar a una mayor concentración de poder en manos de algoritmos, afectando las oportunidades para profesionales y artistas que dependen de la creatividad y la intuición humana.
Otro aspecto negativo es el riesgo de que la IA contribuya a la proliferación de la desinformación y deepfakes en la industria del entretenimiento. La capacidad de la IA para manipular imágenes y sonidos de manera convincente podría ser explotada para crear contenido falso, lo que plantea amenazas a la integridad de las obras cinematográficas y a la reputación de los artistas. Esto no solo podría socavar la confianza del público en la autenticidad de las producciones, sino que también podría tener implicaciones éticas y legales importantes en términos de uso indebido de la tecnología para distorsionar la realidad en el mundo del cine y la televisión.