El último miembro sobreviviente de los Bee Gees habló recientemente sobre las peleas que tuvo con sus hermanos antes de que murieran, cómo su esposa lo salvó de las drogas y por qué tuvo que pedirle a Michael Jackson que se fuera de su casa.
Barry Gibb, que ha vivido desde 1974 en Miami cuando la carrera de los Bee Gees se estancó y Eric Clapton sugirió que un cambio de escenario les vendría bien, ofreció una entrevista a The Guardian donde reveló que tanto él como sus hermanos, los mellizos Maurice y Robin, trabajaron con Michael Jackson, aunque la música de esos encuentros nunca salió a la luz.
“Nos sentamos en mi salón durante días, simplemente divirtiéndonos, sin escribir canciones. Se nos ocurrió una, “All in My Name”, pero nunca lo tomamos en serio. Creo que Michael solo estaba tratando de escapar del entorno legal en el que estaba atrapado, estaba visitando a personas con las que sabía que podía identificarse, porque no sabía quiénes eran sus amigos”, relató Gibb, de 74 años.
Michael, dónde sea que vayas, te tienes que ir
“Pero luego empezó a pasar el rato en la casa todo el tiempo y yo tenía que levantarme por la mañana; soy 12 años mayor que él, tenía que llevar a mis hijos a la escuela. En algún momento, dije: ‘Michael, dónde sea que vayas, te tienes que ir’’. Así fue como le pedí cortésmente a Michael Jackson que se fuera de mi casa”.
Gibb recientemente celebró su 74 cumpleaños y su aniversario de bodas de oro el mismo día: conoció a su esposa Linda, una ex Miss Edimburgo, detrás del escenario en Top of the Pops a finales de los 60.
Todos los hermanos de Gibb lucharon con su fama: la afición de Maurice por el whisky y la Coca-Cola se convirtió en un problema con la bebida que lo atormentó hasta que ingresó a rehabilitación a principios de los 90; a Robin le gustaban demasiado las anfetaminas; el hermano menor, Andy, catapultado al éxito en solitario gracias a la fama de sus hermanos, desarrolló una adicción a la cocaína que lo mató a los 30 años.
Podría traer drogas a la casa pero terminarían por el inodoro. Ella nunca me permitió ir en esa dirección
El hecho de que Barry saliera relativamente ileso de la popularidad aparentemente se debe a su esposa. “Mis hermanos tuvieron que lidiar con sus demonios, pero yo estaba casado con una dama que no iba a permitirlo”, afirmó. “Podría traer drogas a la casa pero terminarían por el inodoro. Ella nunca me permitió ir en esa dirección”.
Robin Gibb murió de cáncer en mayo de 2012. Barry estaba a punto de embarcarse en una gira mundial en solitario pero todavía estaba obsesionado por la muerte de su hermano, con quien estaba no estaba en buenos términos cuando falleció, preguntándose en voz alta por qué Robin se había negado a decirle que estaba enfermo. Lo mismo le sucedió con Maurice: “No teníamos diálogo” cuando murió repentinamente durante una operación en 2003. Y también con Andy: en su última conversación, Barry había intentado sacarlo de sus adicciones, pero unos días después estaba muerto.
Hoy es más optimista sobre el pasado, aunque no niega que le impactó volver a recorrer la carrera de los Bee Gees para el nuevo documental, “How Can You Mend a Broken Heart” (”Cómo puede reparar un corazón roto”), que se estrena el 12 de diciembre: “He tenido que lidiar con la pérdida, no solo con mis hermanos, sino con mi madre y padre. Pero lo que he aprendido de todo esto es que las cosas simplemente siguen adelante y tú sigues adelante”.
“How Can You Mend a Broken Heart” está repleto de grandes nombres que rinden homenaje al talento compositor de Gibbs: Chris Martin, Noel Gallagher, Mark Ronson y Justin Timberlake, entre otros.
El 8 de enero sale oficialmente un nuevo álbum que ha hecho, Greenfields: The Gibb Brothers Songbook, Vol. 1, donde vuelve a interpretar el catálogo de los Bee Gees en compañía de una amplia gama de estrellas country. Grabado en Nashille, el disco cuenta con las voces de Dolly Parton, Keith Urban, Sheryl Crow, Miranda Lambert, Brandi Carlile, Olivia Newton-John y Little Big Town, entre otros invitados.
Además de las nuevas versiones de los éxitos favoritos de Bee Gees como “Jive Talkin” y “How Deep is Your Love”, el nuevo trabajo incluye “Words of a Fool”, una colaboración con Jason Isbell que, según Variety, la pista fue escrita originalmente hace décadas por Gibb.