El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció este jueves que envió al Congreso un proyecto de ley para impedir la apertura de juicios por “gatillo fácil” o violencia de Estado contra militares y policías que estén actuando en operaciones de intervención federal para la garantía de la ley y el orden.
La declaración la hizo Bolsonaro durante el lanzamiento de su nuevo partido, Alianza por Brasil, el cual preside, tras abandonar luego de dos años el Partido Social Liberal, con el cual fue elegido.
El proyecto de ley, que fue respaldado por el ministro de Justicia, Sergio Moro, es llamado de “excluyente de ilicitud” y tiene que ver con las garantías judiciales que le pedían las Fuerzas Armadas a Bolsonaro para seguir con la intervención en Río de Janeiro.
Bolsonaro se negó a continuar la intervención federal militar en Río de Janeiro, con el Ejército con papel de policía, a raíz de las causas judiciales por casos de violencia policial y abuso de poder.
El proyecto está destinado a las intervenciones llamadas Garantía de Ley y Orden y protege al Ejército, Marina y Fuerza Aérea y a todas las policías involucradas en esas operaciones.
El proyecto considera “legítima defensa” cuando un militar o agente de seguridad rechaza una agresión capaz de matar o herir, restringir la libertad de una víctima y portar ostensiblemente armas de fuego o un acto de terrorismo.
Bolsonaro participó este jueves en un acto con parlamentarios, frente a los que presentó las bases del nuevo partido. El mandatario anunció la semana pasada su intención de fundar una nueva plataforma política tras su desvinculación del Partido Social Liberal (PSL), del que fue candidato presidencial en las elecciones de 2018.
En un documento distribuido durante el acto, se dice que el nuevo partido reconocerá “el lugar de Dios en la vida, en la historia y en el alma del pueblo brasileño” y que “se esforzará para divulgar las verdades sobre los crímenes de los movimientos revolucionarios, como el comunismo, el globalismo y el fascismo”.
En un muy breve pronunciamiento, Bolsonaro reafirmó que el nuevo partido no funcionará como una “oficina de negocios”, que combatirá frontalmente a la corrupción y que ninguno de sus dirigentes ocupará algún cargo de ministro en su Gobierno.
Con licencia para matar ! Por eso, es peligroso que un gobierno, con el pretexto de la criminalidad, refuerze a policías y soldados. Después estarán listos para reprimir las protestas. La historia se repite y el lugar también! Evo vuelve !!
Otro criminal loco, que no entiende que los gobernantes tienen que proteger a los ciudadanos quienes son los que pagan los impuestos para mantener el aparato estatal.
Los delincuentes asaltan el ejecutivo en algunos países de Nuestra América. En Hon, Col, Ecu, Chi, Bra y Bol. Todos bien peinaditos y de corbata, pero todos rolo ‘e delincuentes. Está claro que ejércitos y policías son meras bandas de asesinos.
Eso es copia de la peliteñida Boliviana que dio carta blanca para asesinar a los indigenas que son la mayoria. El loco de Bolsonaro ya siente que le prenden fuego a Brasil, paradojicamente su bandera dice orden y progreso..
Como el imperio esta dando golpes de Estado en esta region es logico que los pueblos que estan hartos del sistema neoliberal se subleven..por eso es que esto apenas COMIENZA….y nuestro Judas debe de ponerse a trabajar para evitarlo……