El capitán del Liverpool, Jordan Henderson, insistió en que la diatriba de Sadio Mane en Burnley mostró el deseo de su equipo de ganar la Premier League. El futbolista africano protestó fervientemente después de ser sustituido durante la victoria por 3-0 del Liverpool el sábado.
Aparentemente, el extremo de Senegal estaba molesto por el hecho de que en una jugada puntual de ataque, Mohamed Salah no le hubiera pasado el balón cuando se encontraba de cara al arco y haya preferido amagar y rematar incómodo.
Mane pasó al jefe de los «Reds», Jurgen Klopp, y tuvo que ser consolado por sus compañeros de equipo Henderson, James Milner y Roberto Firmino en el banco.
Klopp afirmó que todo se había arreglado, después del último incidente en el que Salah optó por disparar en lugar de pasársela a un colega mejor ubicado. «Hubo una situación en el juego por la que no estaba contento. Sadio es un tipo emocional. No estaba contento con algo, claramente, ¡pero no fue por el cambio! Es algo de lo que hablaremos en el vestuario y seguiremos adelante», explicó tras el partido.
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Henderson, sin embargo, dijo que estaba contento de ver el fastidio de Mane en su rostro, generalmente amable, porque subrayaba la pasión que siente en el equipo de Liverpool. «Lo he visto así de vez en cuando. Sadio está bien, es un gran muchacho», reconoció.
«Solo estamos presionándonos todo el tiempo. Creo que es importante. Todos queremos mejorar, pero estamos muy cerca y creo que podemos lidiar con eso», consideró y agregó que, «lo más importante fue que obtuvimos el resultado, Sadio lo sabe. Se desempeñó muy bien nuevamente».
Por primera vez en su historia, el Liverpool ganó sus primeros cuatro partidos de liga en temporadas sucesivas. Después de haber sido superado por el título por el Manchester City la temporada pasada, el conjunto de Klopp está en buena forma de cara al parate por las fechas FIFA.
«Queremos ganar todas las semanas, queremos actuar todas las semanas y eso es difícil porque hay tantos equipos buenos en la Premier League y en Europa. Es realmente difícil», reconoció el capitán del equipo.
