A pesar de no existir ningún estudio que indique que la Tierra puede alcanzar temperaturas como las de Venus debido al efecto invernadero, es importante reducir este tipo de emisiones, aseguró la investigadora Leticia Carigi Delgado.
De acuerdo con una investigación elaborada por la NASA, Venus pudo haber tenido un océano de aguas líquidas poco profundas y temperaturas de superficie habitables durante sus primeros dos mil millones de años.
Los hallazgos, publicados en 2015 en la revista “Geophysical Research Letters“, fueron obtenidos con un modelo similar al usado para predecir el cambio climático en la Tierra.
En la actualidad Venus tiene una atmósfera de dióxido de carbono 90 veces más gruesa que la de la Tierra. Casi no hay vapor de agua y las temperaturas alcanzan los 462 grados Celsius.
Durante varios años los científicos han tenido la teoría que el segundo planeta del sistema solar se formó mediante ingredientes similares a los de la Tierra, sin embargo, ambos tomaron un camino evolutivo diferente.
“Venus tiene temperaturas de 460 o 470 grados centígrados, esto le sucedió al planeta muy temprano en su formación. Si tuvo agua, esta se evaporó y ayudó a aumentar aún más la temperatura y por eso Venus en la actualidad es caliente”, apuntó la investigadora del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En entrevista con Notimex, Carigi Delgado explicó que no se tienen estudios y cálculos precisos para concluir que el “planeta azul” tendrá temperaturas similares a las de su vecino, el cual tiene una atmósfera densa, llena de dióxido de carbono que provoca el efecto invernadero.
“Tendríamos que aumentar más del 10 por ciento de todo lo que tenemos para quemar y convertir en dióxido de carbono, que ese es el gas de efecto invernadero que estamos produciendo los seres humanos, y según los cálculos no tenemos en la Tierra esa cantidad”, añadió.
La Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), detalla que debido a la ubicación cercana de Venus con el Sol, los primeros océanos del planeta se evaporaron, las moléculas de vapor de agua se rompieron a causa de la radiación ultravioleta y el hidrógeno escapó al espacio.
Así, sin agua en la superficie, el dióxido de carbono se acumuló en la atmósfera, esto llevó al planeta a tener un efecto invernadero desbocado que creó las condiciones actuales.
“Se piensa, hay pruebas pero no son tan contundentes, que Venus en sus orígenes tuvo agua y por su cercanía con el Sol, el planeta se calentó”, señaló Carigi Delgado.
Agregó que debido a la actividad volcánica registrada en el pasado y en el presente, es que Venus llegó a este violento efecto invernadero.
“El dióxido de carbono por la actividad volcánica y su cercanía al sol, se calentó y llegó a este efecto invernadero. Venus tiene atmósfera, con unas nubes muy densas que inclusive retroalimentan el efecto invernadero”, apuntó.
Sin embargo, la astrobióloga destacó que dentro de mil millones de años el Sol aumentará su luminosidad y por ende la Tierra se calentará y alcanzará temperaturas cercanas a los 47 grados centígrados.
“Lo que va a suceder es que el agua de los océanos se calentará, toda el agua se evaporará poco a poco, el agua en forma de vapor es un gas de efecto invernadero, va a aumentar esta producción de temperatura”, dijo.
La especialista señaló que los actuales cambios en la temperatura de la Tierra han sido de manera principal por las actividades del ser humano y no porque haya habido emanaciones de dióxido de carbono a nivel natural.
Ante ello, Leticia Carigi destacó la importancia de reducir la quema de petróleo, el uso de autos de combustión, contaminación, y otras acciones que producen dióxido de carbono el cual genera el efecto invernadero.