En las costas estadounidenses de la ciudad que nunca duerme, científicos marinos descubrieron un insólito acontecimiento que implica a un tiburón blanco que fue atacado en la cabeza por un animal de grandes proporciones.
Chris Fisher, uno de los expertos y fundador de la organización Ocearch (fundación que estudia la vida animal marina en tiempo real), capturaron a un tiburón blanco de cuatro metros de largo y un peso aproximado de 530 kilogramos, el cual tenía marcas de mordeduras en su cabeza, algo sorprendente porque el animal ya mencionado, es el depredador más grande del océano.
Algo desconcertante para los investigadores marinos, pero luego de recordar que las hembras maduras miden alrededor de 6 metros, se apaciguaron y dijeron los siguiente: Encontramos a tres machos en el mismo lugar y los otros dos presentaban muestras viables de semen, quizás Vimy (nombre que le dieron al tiburón capturado) simplemente era el muchacho pequeño del grupo.»
Efectivamente sabemos que el apareamiento entre tiburones es muy violento, se muerdan entre ellos en la cabeza, no es algo nuevo, esto es una parte cotidiana de su vida», finalizó Fisher.
No obstante aún hay probabilidad de que algo aún más grande haya sido el culpable de esto, hay que tener en mente que solo el 5 por ciento del océano ha sido explorado y muchas criaturas sin conocer siguen ocultas en el abismo marino.
