Utilizando tecnología nuclear, China ha detectado más de 40 elementos químicos en las muestras de suelo lunar traídas a la Tierra por la misión Chang’e-5, informó este domingo el Global Times citando a un equipo de científicos que asegura que el descubrimiento servirá de referencia para el estudio de la formación y evolución de la Luna. El hallazgo científico también impulsará, según los expertos, la utilización de los recursos lunares.
«Utilizamos principalmente reactores nucleares para estudiar las muestras, analizando con precisión más de 40 elementos químicos, incluidos macroelementos, microelementos y oligoelementos», explicó Guo Bing, director del instituto de física nuclear del Instituto de Energía Atómica de China (CIAE, por sus siglas en inglés), afiliado a la Corporación Nuclear Nacional de China.
El CIAE realizó un análisis de activación de neutrones y descubrió que las sustancias químicas contenidas en las muestras lunares de Chang’e-5 eran muy diferentes a las de la Tierra.
Los expertos señalaron que el análisis de activación de neutrones tiene un alto grado de precisión, ya que puede determinar exactamente qué elementos contiene el suelo lunar sin destruir la morfología de las muestras, así como la concentración de dichos elementos midiendo los rayos reflejados por cada uno.
«Por ejemplo, podemos extraer más de 30 kilogramos de titanio de una tonelada de muestras lunares, cuyo contenido es más de seis veces el titanio promedio en la Tierra», señaló Guo.
Por su parte, el vicepresidente del Comité de Transporte Espacial de la Federación Astronáutica Internacional, Yang Yuguang, dijo que el equipo también prevé estudiar el contenido isotópico de las muestras lunares, lo que servirá como una referencia importante para el estudio de la formación y evolución de la Luna.
«La mayoría de los elementos de la Tierra están presentes en la Luna, pero hay algunas diferencias en el contenido isotópico. Además, hay algunos materiales diferentes que solo se pueden encontrar en la Luna», declaró Yuguang, concluyendo que aún se requiere una gran cantidad de estudios para probar una de las teorías actuales, y más aceptadas, sobre cómo se formó la Luna, la que propone que nuestro satélite natural se formó a partir de la colisión entre la Tierra y otro planeta pequeño.
La misión china de exploración lunar robótica Chang’e 5 fue lanzada el 23 de noviembre de 2020 y alunizó el 1 de diciembre de ese mismo año. Veintitrés días después, regresó a la Tierra con muestras de suelo y rocas lunares —que pesaban 1.731 gramos— con la finalidad de estudiarlas.