Este 31 de enero se han difundido por primera vez varias fotografías que muestran los restos momificados del faraón Tutankamón, descubiertos por el egiptólogo británico Howard Carter en 1922.
En las imágenes, tomadas después de que finalizaran unos trabajos de restauración que duraron nueve años, se ve el cuerpo completo de Tutankamón cubierto por un lienzo de lino y colocado dentro de una vitrina con control de temperatura ubicada en el valle de los Reyes.
Los expertos del Instituto de Conservación Getty (California, Estados Unidos) y del Ministerio de Antigüedades de Egipto no solo acondicionaron la tumba, sino que instalaron barreras y establecieron un sistema de ventilación para minimizar posibles daños en el lugar.
Esos especialistas también determinaron que las misteriosas manchas marrones que crecían en las pinturas murales dentro de la tumba —y algunas teorías estimaban que representaban una maldición contra quienes llegaran allí— eran microbios muertos hace mucho tiempo, pero no los pudieron eliminar sin alterar la obra.