Jorge Arbaiza, de 61 años, esperaba para ser atendido en un McDonald’s, en Texas, cuando dos grupos de adolescentes ingresaron al restaurante de comida rápida y terminó baleado mortalmente durante un tiroteo.
El Departamento del Alguacil del Condado Harris, en Texas, informó que un hombre murió y al menos una persona resultó herida luego de que una pelea entre dos grupos de jóvenes en un restaurante McDonald’s de Katy culminara en un tiroteo.
Su esposa se salvó «de milagro» porque lo estaba esperando afuera. «Me sentí muy impactado», comenta entre lágrimas el señor Raúl Mendoza, quien fue durante muchos años vecino de Arbaiza.
«Iba a agarrar algo para sus nietas y entraron corriendo dos muchachos, atrás otros dos siguiéndolos. Dispararon ahí, al pobre le tocaron. Él estaba en la línea esperando adentro del restaurante para pedir», dijo.
El otro herido, un joven de 25 años que participó en la pelea, se encuentra en proceso de recuperación.
Las autoridades señalaron que el local estaba lleno de clientes, incluidos niños, lo que generó una escena caótica.