Desde mediados del mes de marzo el cometa Pons-Brooks, también conocido como el “Cometa Diablo” debido a su peculiar apariencia con cuernos, puede ser observado a simple vista desde España. Este fascinante objeto celeste, que tiene un tamaño similar al del Monte Everest, realizará su primera visita al sistema solar interior en más de 70 años y alcanzará su máximo brillo el próximo 21 de abril.
El doctor Robert Massey, subdirector ejecutivo de la Royal Astronomical Society (RAS) británica, la mejor oportunidad para observar este fenómeno será desde ahora hasta mediados de abril, aunque no será una tarea sencilla.
«Si no hay Luna en el cielo, si no hay contaminación lumínica y si el cielo está realmente despejado, entonces podrías tener una oportunidad de verlo a simple vista. Pero la mayoría de nosotros necesitaremos un par de binoculares», explica Massey.
Para los amantes de la astronomía en España, se recomienda mirar hacia el oeste-noroeste en las últimas semanas de marzo, después de la puesta del sol, para tener la posibilidad de vislumbrar y obtendrá la mayor claridad el 21 de abril. Se requieren binoculares para asegurar su observación. Y es importante destacar que este objeto celestial completa su órbita una vez cada 71,3 años, por lo que no volverá a ser visible hasta el año 2095.
Las características del cometa Pons-Brooks son de un cuerpo helado, cuyo núcleo se estima en unos 34 kilómetros de diámetro, presenta dos características inusuales que han llamado la atención de los observadores. En primer lugar, las fotografías de su aproximación han captado un curioso color verde, que se debe a la presencia de una molécula llamada dicarbono. «Lo que hace es absorber la luz solar y reirradiar parte de ella con ese característico tinte verde», explica Massey.
Por otro lado, el cometa ha mostrado en ocasiones una peculiar «apariencia con cuernos», lo que le ha valido el apodo de «Cometa Diablo». Estas formas puntiagudas se deben a que Pons-Brooks está clasificado como un cometa criovolcánico, lo que significa que regularmente entra en erupción con polvo, gases y hielo cuando aumenta la presión en su interior a medida que se calienta.
Historia y descubrimiento del cometa
El cometa Pons-Brooks fue reconocido como tal en 1812, aunque ya había sido avistado en el siglo XIV. Lleva el nombre del astrónomo francés Jean-Louis Pons, quien lo descubrió a principios del siglo XIX, y del astrónomo británico-estadounidense William Robert Brooks, que lo observó en su siguiente órbita en 1883.
La aproximación del cometa Pons-Brooks ha generado una gran expectación en la comunidad astronómica internacional, ya que brinda una oportunidad única para estudiar de cerca un objeto celestial que solo visita el sistema solar interior cada siete décadas. Científicos de todo el mundo están preparando sus instrumentos para analizar en detalle las características y comportamiento de este misterioso visitante cósmico.
Además, el evento también despierta el interés del público general, ya que ofrece la posibilidad de observar un fenómeno astronómico poco frecuente y espectacular. Muchos aficionados a la astronomía en España y en todo el mundo están atentos a las indicaciones de los expertos para no perderse la oportunidad de ver el cometa Pons-Brooks en el cielo nocturno.