La administración de Donald Trump podrá seguir aplicando el Protocolo de Protección de Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés), luego de que la Corte Suprema de EE.UU. confirmara el miércoles la validez de esta política conocida como ‘Permanecer en México’. En efecto, la medida dispuesta por el Gobierno republicano estipula que los solicitantes de asilo se queden en el país vecino mientras realizan el pedido formal.
Antes, el Ejecutivo había apelado el fallo de un tribunal inferior, que consideraba ese programa como ilegal. En ese momento, los jueces habían ordenado la suspensión del plan, que se iba a hacer efectiva este jueves.
«La evidencia incontestada en el expediente establece que los no mexicanos que regresaron a México correrán el riesgo de sufrir daños sustanciales, incluso la muerte, mientras esperan la adjudicación de sus solicitudes de asilo», consideraron los titulares del Tribunal de Apelaciones, cuyo fallo acaba de quedar sin efecto.
Inicialmente, los magistrados del estado de California establecieron que la medida dispuesta por Trump viola la ley de inmigración local y, además, expresaron que no respeta normativas internacionales de derechos humanos. Así, se había ordenado detener el ‘Permanecer en México’ en toda la frontera para el 12 de marzo.
A su vez, la Corte de Apelaciones para el Noveno Circuito confirmó esa resolución, pero sostuvo que solo podría aplicarse en los estados de California y Arizona, que son de su jurisdicción. El Gobierno continuó apelando hasta llegar a la autoridad judicial más importante, que respondió hoy a su favor.
60.000 solicitantes rechazados
Ahora, con la aprobación de la autoridad máxima del Poder Judicial estadounidense, seguirá en curso el sistema que ya prohibió la entrada de 60.000 solicitantes de asilo desde que comenzó a regir este sistema, hace poco más de un año. Muchos de esos migrantes en condición irregular, que se marchan de sus países de origen en busca de nuevas oportunidades, provienen de Centroamérica.
Por su parte, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) había presentado un escrito ante la Justicia la semana pasada, donde explicaba el rol que cumple el protocolo. Según ese organismo, el programa sirve para «procesar decenas de miles de extranjeros que solicitan asilo sin la necesidad de detener a los solicitantes en EE.UU. durante las semanas y los meses que lleva analizar sus solicitudes», cita The Hill.
Sobre la reciente resolución de la Corte, la jueza Sonia Sotomayor planteó su oposición a la política gubernamental. Además, este mecanismo ya había despertado críticas y polémicas entre la clase dirigente local, al considerar que se pone en riesgo a los migrantes que desean permanecer en el país norteamericano.