Un hombre de Texas de 57 años cuyo paradero era desconocido desde hace meses fue comido, con todo y huesos, por sus propios perros, informaron las autoridades.
Freddie Mack padecía de severos problemas de salud y se desconoce si sus 18 perros lo mataron o se lo comieron después de que falleciera de un problema médico, señaló el jefe de policía del condado de Johnson, Adam King.
Un familiar reportó en mayo la desaparición de Mack de su residencia cerca de Venus, una comunidad con menos de 4,000 habitantes ubicada unos 50 kilómetros (30 millas) al suroeste de Dallas.
El departamento de policía señaló que Mack no estaba dentro de su propiedad y, después de varios días de búsqueda los investigadores volvieron y encontraron restos de cabello humano, ropa y huesos en las heces de los perros.
El martes, expertos forenses informaron al departamento de policía que el análisis de ADN demostró que los fragmentos óseos pertenecían a Mack.
Que perro esta eso