De las siete fases del Plan Control Territorial que anunció el presidente Nayib Bukele, seis ya están activas, la última fue anunciada recientemente a través de cadena nacional.
La primera fase fue Preparación, enfocada en crear las condiciones para que la Policía Nacional Civil (PNC), con el efectivo apoyo de la Fuerza Armada, pudieran avanzar a través de una detallada preparación y comenzar a recuperar los territorios, en favor de la población honrada.
Después vinieron la fase 2, Oportunidades, y la fase 3, Modernización. Estos dos capítulos hacen énfasis en la prevención, desde el lado de la población y también de la capacidad instalada para combatir el crimen. Fue así que inició la construcción de los Centros Urbanos de Bienestar y Oportunidades (CUBO) y la fuerte inversión para fortalecer a instituciones como la PNC y la Fuerza Armada con más insumos y la dignificación de su labor.
Meses después, el presidente Bukele anunció en diferentes ocasiones las fases cuatro y cinco del Plan, que son Incursión y Extracción, respectivamente. La médula de las dos fases es enfrentar con severidad a los criminales. Fue así que el Gobierno fue debilitando las estructuras terroristas y liberando a la gente de la opresión en la que vivieron durante décadas.
En marzo de 2022, ante un cobarde intento de las pandillas por desquitarse con gente inocente, el presidente Bukele inició la Guerra contra Las Pandillas, que reforzó las estrategias del Plan, sostenida con el régimen de excepción.
De esta manera, el Plan arribó a su sexta fase, Integración, que construirá las bases para una sociedad más unida, con una dirección claramente definida para el desarrollo sostenido que siempre ha necesitado El Salvador.
REFLEXIONANDO: 1) veo las quejas d la oposición por el tema seguridad 2) y aunque CUESTIONO EL MESIANISMO, CREENCIAS DOGMÁTICAS Y SUPERSTICIONES DEL PROTO MESÍAS 3) volver a «la mierda» que nos ha gobernado sería un suicidio social. VAÁ!!!