Este martes, el personal de la Unidad de Salud Básica Rosales se desplegó durante la mañana para llevar a cabo la fumigación en la comunidad Tutunichapa I y II, en San Salvador. «El objetivo es erradicar a los vectores de dengue y hacerle conciencia a la población de ayudarnos dentro de sus casas, no teniendo recipientes con agua acumulada», dijo la coordinadora del Equipo Comunitario de Salud Rosales, Dra. Evelyn Solórzano.
Estas acciones forman parte de la atención que el Gobierno está llevando a las comunidades en materia de prevención y promoción de salud, ya que con la fumigación también se busca hacer conciencia en la población sobre la responsabilidad de eliminar criaderos de zancudos, como recipientes y llantas con agua acumulada.
El mecanismo utilizado para esta jornada fue a través de cinco bombas de fumigación, cuatro para ingresar a los pasajes y casas, y una para fumigar la calle principal. “Con la partida del invierno, las aguas estancadas sirven de criaderos de larvas y zancudos, y crece la probabilidad de enfermedades como el dengue”, manifestó el director de la Unidad Comunitaria de Salud Familiar San Miguelito, Cristóbal Nuila.
Son más de 400 familias y un aproximado de 2,000 personas las beneficiadas con la jornada de fumigación.
«Esto es importante porque así evitamos los casos de dengue, chikubgunya y zica, la prevención con fumigación es buenísima y el apoyo de la gente con el aseo en sus casas, a través de la eliminación de criaderos de zancudos», dijo la promotora de Salud, Cecilia de Lourdes Rivas.