Euronews publica: «Ojo, Trump, Nayib Bukele, presidente de El Salvador, también quiere ser presidente de Twitter»

“A veces tocará tomar medicina amarga”, tuiteó el nuevo presidente de El Salvador, Nayib Bukele, tras realizar su primer despido en Twitter tan solo un día después de asumir el cargo el pasado 1 de junio. Pero eso era tan solo un aviso de lo que estaba por venir.

En menos de una semana, el apodado “presidente milenial” ha ordenado el despido de una treintena de funcionarios públicos ligados al Frente Farabundo Martí (FMLN). Alrededor de un tercio de ellos son familiares del expresidente Salvador Sánchez Cerén. Y todo esto lo hizo vía Twitter, marcando la sentencia con una palabra final: «medicina».

Los nuevos miembros de su Gobierno han acatado las ordenes de inmediato, respondiendo por Twitter de la misma manera.

A pesar de haber despedido a más personas que Sánchez Céren durante todo su Gobierno, el presidente de origen palestino también ha ordenado nuevos contratos. Fue el caso, por ejemplo, de José Rafael Mena Castaneda, un talentoso estudiante en arquitectura que hace unos meses casi deja los estudios a causa de problemas económicos. Sus ganas de seguir estudiando lo llevaron a emprender un proyecto fabricando buses de cartón a escala. Cuando Nayib leyó su historia en un medio local, «ordenó» al Comisionado presidencial de proyectos estratégicos del país que entrevistara al joven.

Tan solo horas después, anunció que José Rafael había sido contratado para modernizar las escuelas salvadoreñas.

Los reclutamientos del presidente también han involucrado puestos más importantes, como el de Zelma Escalante, nombrada subdirectora nacional de

Este es el tuit que el presidente más joven de la historia reciente del «pulgarcito de América» ha fijado en su cuenta. Se trata de un vídeo hecho por el youtubero mexicano Jacobo Wong en el que habla de la ola de despidos del mandatario salvadoreño. En el vídeo, llamado «el presidente más cool del mundo», también confiesa que ese día le había dado flojera bañarse.

Nayib Bukele no se ha quedado indiferente y publicó un tuit «ordenando» a la estrella mexicana «bañarse antes de hacer vídeos» sobre él.

«Oficialmente soy el Presidente más cool del mundo» afirmó después, compartiendo el vídeo del artista. Su publicación ya cuenta con más de 32 mil «me gusta» y fue compartido más de 4 mil veces.

Los usuarios de la red de esta red social están sorprendidos, y no todos de la misma manera. Para muchos, las publicaciones de Nayib Bukele son sinónimo de transparencia y se alegran al ver que el nuevo presidente está tomando medidas y haciendo algo por un país que sufre de muchos problemas, como violencia, pobreza y corrupción.

Otros tuiteros también se toman la situación con gracia.

Sin embargo, para otros, la «guerra» que está llevando Bukele contra el FMLN es un abuso de poder. Además, medios locales han revelado que su Gobierno también está compuesto por varios de sus familiares.

Para Jaime García Oriani, analista político salvadoreño, Nayib Bukele podría enfrentarse a otros problemas si no sigue el proceso legal de despidos que tiene El Salvador.

«Aquí la ley protege al funcionario público, no es que puedas echarlos porque sí», dice en una entrevista con Euronews.

Sin embargo, para el experto esto podría ser una estrategia política, ya que si el despido no se justifica, los funcionarios podrían «pedir amparo»y podrían ser reinstalados. Esto generaría disgusto en la población y podría ser usado «como campaña» para decir que son «los mismos de siempre» los que se quedan con los puestos de poder.

«Es un show el que está haciendo para mostrar que va a marcar un cambio entre el gobierno anterior y este», opina.

Según el analista, el uso que el joven presidente ha estado dando a las redes «genera simpatía con la gente que se siente traicionada por el FMLN».

Twitter siempre ha sido la herramienta social favorita de Nayib Bukele y ha sabido utilizarla bien. El «presidente milenial» no participó en debates ni dio entrevistas, por lo que las redes sociales fueron su principal arma política para luchar contra la corrupción y, sobre todo, contra el bipartidismo que dominó El Salvador en las últimas décadas.

«Él sabía que es su plataforma fuerte y la está usando para hacer sentir el Gobierno cercano a la gente», comenta Oriani.

Aunque algunos comparan su estrategia con la del presidente estadounidense Donald Trump, todavía está muy lejos de convertirse en «el presidente de Twitter». Trump cuenta con casi 70 millones de seguidores, mientras que Bukele tan solo tiene 739 mil.

¿Es posible que «el presidente más cool del mundo» también se convierta «en el presidente de Twitter»? La orden ya ha sido lanzada.

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