El Gobierno a través de la Administración Nacional de Acueductos y alcantarillados (ANDA) trabaja por un mejor acceso al agua en el Corredor Seco y en las comunidades históricamente abandonadas.
“Como institución queremos abordar más y más salvadoreños, apostarle al Corredor Seco a esa zona marcada por el estrés hídrico y por el cambio climático, llegar a toda esa gente que por décadas fueron olvidadas”, indicó el presidente de la autónoma, Rubén Alemán.
En pocos meses se inaugurará en Jocoro, Morazán, un proyecto de mejora del servicio de agua potable para más de 6 mil habitantes en este importante sector del Corredor Seco. Es una obra que se ejecuta gracias a la cooperación del País Vasco.
También en medio del Corredor Seco, en San Sebastián, La Unión, se está perforando un pozo y se está construyendo una planta de bombeo para brindar agua potable a más de 5 mil habitantes del sector, cumpliendo con el mandato del Presidente Nayib Bukele.
Este era un sector olvidado en el Corredor Seco y el cual sufrió serios problemas de contaminación por la explotación de minería, y que ahora contará con agua en cantidad y calidad.
Otro proyecto importante desarrollado en la actual administración es la instalación de la primera planta desalinizadora fija del país, en isla Madresal, Puerto El Triunfo (Usulután), que, mediante el proceso de ósmosis inversa, convierte el agua salada del mar en potable.
También, gracias al Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) se está en el proceso de instalar dos nuevas plantas en playas San Diego y El Majahual, La Libertad. Una más estará en playa Las Hojas, La Paz.
Esta es una alternativa para llevar agua a sectores históricamente abandonados en el país. Con estos proyectos se está mejorando la calidad de vida de miles de personas y se está reafirmando el compromiso que tiene el Gobierno del Presidente Nayib Bukele por saldar deudas históricas.