Desde que el nuevo presidente estadounidense anunció la congelación de la ayuda exterior, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) ha estado en crisis: su sitio web es inaccesible, su cuenta X ha sido suspendida, la sede de la agencia fue cerrada y muchos de sus empleados despedidos o en casa a la espera de noticias oficiales.
Elon Musk, a quien Trump eligió para dirigir el Departamento de Eficiencia Gubernamental, calificó a la USAID de “organización criminal” y dijo: “Estamos cerrando”. Más tarde ese día, el secretario de Estado Marco Rubio anunció que fue nombrado director interino de la agencia, sugiriendo que sus operaciones se estaban trasladando al Departamento de Estado.
En ese sentido, el Director Ejecutivo de Reporteros Sin Fronteras (RSF), Clayton Weimers, ha levantado la voz haciendo un llamado a al poyo público y privado al verse sin financiación; en una nota periodística en su sitio web, detalla que los programas de USAID han apoyado a medios de comunicación independientes en más de 30 países, «pero es difícil evaluar el alcance total del daño causado a los medios globales», expresó.
Agregó que muchas organizaciones de este tipo mantienen un perfil bajo por miedo a arriesgar el financiamiento a largo plazo o ser objeto de «ataques políticos»; sin embargo, según datos de la misma USAID, la agencia financió la formación y el apoyo a 6.200 periodistas, asistió a 707 medios de comunicación no estatales y apoyó a 279 organizaciones de la sociedad civil del sector de los medios de comunicación dedicadas a fortalecer los medios independientes, solo el presupuesto de ayuda exterior para 2025 incluyó $268.376.000 dólares asignados por el Congreso para apoyar «los medios de comunicación independientes y el libre flujo de información».
Sin embargo, muchos de estos medios causaban injerencias dentro de países de alto interés para quienes dirigían tras bambalinas la USAID, por lo que, en todo el mundo, los medios de comunicación y las organizaciones han tenido que detener algunas de sus actividades de la noche a la mañana tras este anuncio. Solo en Ucrania, el principal donante para los medios de comunicación es USAID, donde 9 de cada 10 medios dependen de sus subsidios. «En Slidstvo.Info, el 80% de nuestro presupuesto se ve afectado», dije Anna Babinets, directora ejecutiva y cofundadora de este medio de comunicación de investigación independiente con sede en Kiev.
Dentro de los medios que han sido afectados en El Salvador, se encuentra revista Factum, su director, César Fagoaga, reconoció el 1 de febrero que el medio de comunicación que dirige está «pasando una crisis» tras el recorte que anunció el presidente Trump, en la cooperación internacional que se brindaba por medio de la USAID a diferentes entidades salvadoreñas.
«Efectivamente si afecta a Factum Que se corte esa ayuda, evidentemente afecta. Afecta, pero no nos limita, ¿en qué sentido? nosotros vamos a continuar haciendo el periodismo que la gente está acostumbrada, ese periodismo necesario. Si nos afecta, claro que nos afecta porque es parte de nuestro presupuesto, pero no nos bota, no nos desanima», expresó.
Además, dijo que a pesar de que Estados Unidos les cortó la ayuda económica para sostener la revista, han considerado implementar otras medidas para continuar operando, por loque anunció que decidieron comenzar una campaña de recaudación de fondos en su comunidad de seguidores, por lo que instó a los salvadoreños a colaborar con dinero para que la revista siga funcionando.