El 23 de agosto de 2023, Cristian Isaías Arévalo Ramos recibió un mensaje a través de Messenger de una persona interesada en comprar el vehículo que había ofertado en Marketplace.
Tras intercambiar información, acordaron una cita para ver el automóvil y pactaron un precio de $8,000 para cerrar el trato. Sin embargo, más tarde, el vehículo fue incautado a la víctima, ya que tenía reporte de robo.
Como resultado de estos hechos, el Tribunal Primero de Sentencia de San Salvador condenó a Arévalo Ramos a una pena de tres años y tres meses de prisión por el delito de estafa. Además, deberá pagar $8,000 en concepto de responsabilidad civil.