La actriz mexicana Verónica Castro anunció este jueves 12 de septiembre su retiro de la actuación tras una carrera de 53 años, «agotada de tanto mal» y de las agresiones y el escarnio que sufre por una supuesta boda con la actriz y conductora Yolanda Andrade que se viralizó en redes sociales.
Castro publicó en las redes sociales un vídeo de la canción Alguna vez, de su hijo Cristian Castro, y que aparece en el disco, Mi vida sin tu amor, publicado en 1999, para despedirse.
«Quisiera aprovechar esta canción que dice tantas cosas para mí y hacer de su conocimiento de este público infinito, que me merece tanto respeto y que me ha dado tanto, que elegí hoy que es el día de mi santa madre María de Guadalupe y en su nombre les digo adiós», apuntó en un mensaje en Instagram.
Castro señaló que la vida le ha cambiado mucho, pero que no puede «con la agresión y el escarnio». «Digo adiós a lo que tanto amé, mi profesión. Por 53 años entregue mi vida, con todo mi amor. Gracias por todo, pero estoy agotada de tanto mal, y como lo vengo diciendo hace ya muchos años, quiero mi paz», añadió.
Andrade, de 47 años, había declarado públicamente esta semana que unos 20 años atrás se casó con Castro, de 66 años, «de manera simbólica». Y aseguró que tiene pruebas de ello y que no se trata de «ninguna mentira», lo que generó un choque entre ambas.
La confirmación de la presentadora sobre su boda en Ámsterdam con la actriz desató un escándalo que tomó aún mayor dimensión cuando trascendió que Castro también había estado involucrada sentimentalmente con otra mujer, llamada Lizzie Barrera.
En tanto, Verónica expresó su preocupación por el momento que le toca atravesar, durante una entrevista que brindó al programa de radio Todo para la mujer. Allí, señaló que tanto su madre como se hermana no se encuentran bien de salud, y que el escándalo desatado por Yolanda empeoró la situación.
«Quise mucho a Yolanda, la quise mucho. Ya no la quiero. Ya le dije que ya no, porque ya se pasó de graciosa y de simpática, ya se pasó a ser agresiva», señaló Castro. Y agregó: «Dejo de reírme de una estupidez, es como fastidioso, ¿sabes? Mi mamá está en cama, está viendo la televisión y es bastante desagradable escucharla (a Yolanda) decir todo lo que dice. Es como si de repente te sacaran los trapitos de hace 20 o 40 años de tu vida. Yo no estoy vendiendo mi vida ni me interesa venderla».
Por su parte, Andrade reafirmó sus dichos, y disparó contra la actriz: «El hecho que me diga que yo soy una malagradecida, no me ofende, el hecho de que diga que yo soy la lesbiana y ella no, tampoco, está bien; si mañana dice que soy hermafrodita, no me importa. Pero lo que sí me importa es que yo no soy ninguna mentirosa. Yo no he dicho ninguna mentira», dijo.
Y luego, tras señalar que con sus declaraciones Castro había sido despectiva con la comunidad gay, la conductora agregó: «Ya escuché que ya no me quieres. Pero yo sí te quise mucho. Y sí duele, porque mira cómo acabamos. Es cierto, esto pasó hace 20 años, y nunca me imaginé que algo tan bonito y un momento tan importante fuera a terminar en un chisme tan corriente».
Castro debutó en los escenarios en 1964 y protagonizó las producciones Los ricos también lloran (1979), El derecho de nacer (1982), Rosa salvaje (1987) y Pueblo chico, infierno grande (1997), entre muchas otras, que se convirtieron en un éxito en México y que la proyectaron como una estrella a muchos otros países, entre ellos, la Argentina. También se desempeñó como presentadora de programas nocturnos en la televisión mexicana.
Tras una década alejada de los medios, Castro regresó en 2018 a la pantalla chica a través de la plataforma Netflix, con la serie La casa de las Flores, una comedia de humor negro centrada en una familia acaudalada de México, propietaria de una floristería en torno a la cual se tejen todo tipo de secretos.
Sin embargo, en la segunda parte del dramatizado ya no figura el personaje de Virginia de la Mora, la fallecida matriarca del clan interpretada por Castro, quien solo había firmado por una temporada.