Arnold Schwarzenegger es uno de los más grandes héroes de acción que ha tenido la industria del cine a lo largo de los años, figura de grandes papeles como Terminator, Depredador, Conan el Bárbaro, Comando, y muchos otros que marcaron un parteaguas en los fanáticos de éste género.
Pero también se trata de un hombre que vino desde abajo, que con mucho esfuerzo se hizo de un nombre en la disciplina de sus sueños, el Fisicoculturismo, y que después de toda una vida entregada al entretenimiento, se acercó a la gente y luchó por una gubernatura en los Estados Unidos.
Sin duda se trata de una vida llena de altibajos que lo convierten en un ser muy difícil de entender, o al menos eso parece, hasta que Netflix tuvo la idea de meterse en el último rincón de sus recuerdos, de sus sentimientos, de su humanidad, para mostrarnos una cara poco conocida del actor, deportista y político.
La serie de Arnold que te dejará sin aliento
El proyecto del gigante del streaming culminó en la grabación, producción y lanzamiento de una miniserie que solamente tiene tres capítulos, pero cada uno lleno de emociones muy diferentes. Lo mismo explorarás la alegría que el amor, la frustración, el miedo, la gloria, la preocupación, las ganas de salir adelante, y también las de echarlo todo abajo.
El primer capítulo nos cuenta su vida desde el momento en que nació, hasta los impresionantes cambios de su padre tras asistir a la Segunda Guerra Mundial, y la violencia que ello significó, el momento en que huyó de casa y cómo es que llegó a refugiarse en una de las actividades deportivas más complicadas de la historia.
El fisicoculturismo, literalmente, le salvó la vida. Comenzó a prepararse desde su adolescencia, y buscó oportunidades por todos lados. Un buen día comenzó su carrera en concursos y pronto se convirtió en el campeón del certamen en su país de origen, Austria, pero también conquistó Europa y decidió mudarse a los Estados Unidos por nuevos horizontes, donde terminó por consagrarse como el más grande de todos los tiempos.
Rumbo al estrellato
Su segundo capítulo empieza con su retiro de las competencias por aburrimiento. Ya no había nada más que ganar, y no podían seguirse inventando competencias de la manga solamente para contener a su increíble voluntad de ser cada día el mejor, el único, el más grande, así que opta por comenzar a prepararse para hacer algunos papeles.
Aunque pronto recibió la invitación para interpretar a Hércules, las cosas no salieron muy bien y estuvo algunos años intentando colocarse como un respetado actor. Un día, de la mano de un amigo le llegó la oportunidad, hizo la película «Stay Hungry» y fue tan grande el interés por su interpretación que ganó un Globo de Oro como actor revelación.
Pronto se vio envuelto en las mieles de la fama, todos lo querían en su película, era un verdadero trancazo de la taquilla. Cuando era parte de una película, seguramente te llevarías una de las más espectaculares ganancias, y todo el mundo la iría a ver al cine porque Arnold imponía así. Gemelos, El regalo prometido, Detective en el Kínder, Daño Colateral, Barman y Robin, lo tenía todo.
La última y nos vamos
En el último capítulo por fin llegamos a ese momento en que decide que el cine ya no será todo lo que haga, pues ha tenido suficiente. Incluso expone sus razones por las que le gustaría estar cerca de la gente, y regresarles solamente un poco delo que tanto le han dado por todos los años que se dedicó al cine.
Fue así que se une al Partido Republicano y comienza su ascenso en la política de los Estados Unidos. Fue George H. W. Bush quien le dio su primera oportunidad en 1990 como el presidente del Consejo de Salud Física y Deportes, e hizo el mismo trabajo, pero ahora en el estado de California.
Fue hasta el mes de agosto de 2003 que logró que le brindaran su apoyo para convertirse en el candidato a gobernador de California. Inmediatamente fue apodado el «Governator» y con el 48% de los votos en las urnas, logró convertirse en el primer inmigrante en llegar hasta una gubernatura dentro del territorio Norteamericano. Tres años más tarde también ganó la reelección.
