Desde la publicación del primer libro, el mundo de Harry Potter ha fascinado a lectores de todas las edades. De hecho, el mejor efecto fue que las novelas se iban publicando poco a poco y eso permitió a muchos niños crecer a la par de los protagonistas, marcando así toda una experiencia para una generación. Con tanto éxito probado, adaptar esta obra al cine era el siguiente paso lógico, pero J.K. Rowling no quería perder control sobre su preciada obra y tardó mucho en encontrar la productora correcta. Warner Bros. se hizo de los derechos y el resto es historia. Ahora que la franquicia está en crisis, mucho se ha hablado sobre adaptar Harry Potter and the Cursed Child, pero parece que la autora tiene la última palabra al respecto, y no es positiva.
Harry Potter y La Piedra Filosofal se convirtió en un gran éxito mundial que lanzó a la fama a Daniel Radcliffe, Emma Watson y Rupert Grint. Año tras año, los fanáticos llenaban las salas para sentirse dentro de este mundo lleno de magia y misterios. Harry Potter y el Prisionero de Azkaban, dirigida por Alfonso Cuarón, marcó un cambio importante y necesario en el tono de la saga y a partir de ahí las cosas lograron llegar todavía más lejos y a ojos de más espectadores. Como siempre sucede con este tipo de movimientos, las novelas, los objetos de colección y todo lo que se acercara remotamente a Harry Potter era de interés y puesto a la venta.
Esto llevó a la creación de varios libros no oficiales que analizaban el efecto de la franquicia o buscaban dar aclaraciones a algunos puntos sobre el canon que Rowling todavía no resolvía. En el cine, otras productoras trataron de encontrar su propia mina de oro, mientras que Harry Potter y Las Reliquias de la Muerte Parte I y Harry Potter y las Reliquias de la Muerte Parte II cerraron con éxito las adaptaciones. Aunque el mero final del libro (y de la cinta) ha sido criticado extensamente, también es reconocido por dejar las cosas claras para evitar secuelas innecesarias.
A pesar de querer dejar atrás el mundo mágico de Harry Potter, Rowling no pudo resistirse a nuevos proyectos dentro de la saga, lo que la llevó a aceptar un millonario trato para desarrollar las precuelas que arrancaron con Animales Fantásticos y Dónde Encontrarlos. Además de esto, también compartió una historia original para una obra de teatro que funciona como secuela de la saga original llamada Harry Potter and the Cursed Child que se enfoca más en la nueva generación, hijos de los protagonistas. La obra se estrenó en 2016 y el amor de los fans fue suficiente para convertirla en un gran éxito a pesar de las críticas a su trama.
Para aquellos que prefieren las películas de Harry Potter que las de Animales Fantásticos, The Cursed Child es el siguiente paso para mantener viva la franquicia, pero no es algo que interese a todos. Para empezar, los actores principales han hablado en varias ocasiones sobre lo agradecidos que siempre estarán por la oportunidad, pero que es momento de dejar atrás a estos personajes. La sensación se profundizó con los comentarios transfóbicos de J.K. Rowling, quien sigue muy activa en esa área y cuyos comentarios alejaron a muchos de sus seguidores. Hace poco se dio a conocer el rumor de que, a pesar de todo, Warner Bros. Discovery quiere mantener cerca a la autora y tal vez hasta desarrollar una adaptación de la mencionada obra de teatro.
Sin embargo, un nuevo reporte explica por qué esta secuela no se aprobó antes y no se aprobará en un futuro próximo. Según Puck News (vía ComicBook.com), Warner Bros. Discovery está más desesperado que nunca por obtener dinero de sus franquicias, y aunque Rowling ya no cuenta con la reputación de antes, saben que los fans irán corriendo a ver lo que sea que se relacione con Harry Potter. Es por ello que intentaron levantar esta otra adaptación, pero la escritora rechazó inicialmente la oferta porque no quería opacar el éxito del proyecto en el teatro. En la actualidad, parece que ella fue quien puso un alto a la productora en su intento por hacer dos películas de la obra. Según el reporte, esto es porque ella quiere que este proyecto siga su curso independiente, abriendo en otras partes del mundo y hasta en algunos cruceros de lujo.
Han pasado seis años desde el estreno de la obra y en el transcurso J.K. Rowling ha perdido muchos de sus seguidores. Quienes todavía aman Harry Potter, prefieren ya no consumir los nuevos proyectos en los que ella esté involucrada. Sin embargo, es claro que Warner Bros. Discovery no pretende deshacerse de la autora; después de todo, el negocio es primero como ya se vio con The Flash y Ezra Miller, así como la cancelación de Batgirl y muchísimas series animadas. La última palabra sobre una posible adaptación de The Cursed Child recae en Rowling, quien podría reconsiderar ahora que la franquicia de Animales Fantásticos luce bastante muerta.
