Un ilusionista de Las Vegas aparentemente se desmayó el jueves al recibir una sentencia de 20 años de cárcel y una multa de más de 500 mil dólares en un caso federal de pornografía infantil.
Jan Rouven Fuechtener, alemán de 40 años, se puso tieso y cayó hacia atrás sobre su asiento luego que la jueza federal Gloria Navarro rechazara su disculpa y su intento por decir que no obtuvo gratificación alguna de los miles de videos e imágenes pornográficas que el FBI encontró en archivos protegidos con contraseñas en nueve computadoras en su residencia apodada la “casa de la risa”.
Fuechtener se recompuso tras beber un trago de agua, sin necesidad de asistencia médica. Sus abogados, Russell Marsh y Sunethra Muralidhara, dijeron después que no estuvo claro si llegó a perder la consciencia.
La jueza calificó a Fuechtener de mentiroso descarado y manipulador que prolongó su proceso en la corte “como una telenovela” y que lo único que él lamentaba era que lo hubiesen atrapado. Le ordenó a Fuechtener pagar 70 mil dólares adicionales en restituciones a las víctimas identificadas en los videos.
“Esto no es aceptable aquí, ni en Alemania, ni en ninguna parte”, dijo la jueza, quien describió los videos como “no solo niños teniendo sexo, sino actos sádicos violentos”.
Previamente, la fiscal Elham Roohani lloró mientras recordaba los “gritos desgarradores” y “gemidos” de niños obligados a tener sexo con adultos en archivos que revisó mientras se preparaba para el caso.
Aun así, Navarro sentenció a Fuechtener a menos de los 23 años recomendados por funcionarios federales de libertad condicional y los 30 años que buscaba la fiscalía. La jueza dijo que Fuechtener no podrá ser liberado antes de sus 60 años de edad y que probablemente sea deportado a Alemania.
Fuechtener adjudicó su colección pornográfica al ocio, al consumo de metanfetaminas y a la gente con la que se rodeaba entre los seis espectáculos semanales que presentaba en el resort Tropicana mientras su esposo, Frank Dietmar Alfter, viajaba por el mundo. El espectáculo fue cancelado tras el arresto de Fuechtener en marzo del 2016.
Fuechtener paró su juicio antes de que los videos fueran hechos públicos declarándose culpable en noviembre de 2016 de posesión, recibo y distribución de pornografía infantil.
Entonces pasó años cambiando de abogados y tratando de anular su declaración, argumentando que sus abogados para el juicio lo engañaron sobre su sentencia.
El caso surgió luego que Fuechtener fue identificado en agosto del 2014 como un coleccionista de pornografía infantil que usaba nombres como “Lars45″, ″LarsUSA22″ y Lars Schmidt en internet.