La actriz, de 62 años, fue considerada una firme candidata al premio tras ganar un Globo de Oro por su papel en ‘The Substance’, en la que interpreta a Elisabeth Sparkle, una celebridad en decadencia que descubre una droga en el mercado negro que la transforma temporalmente en una versión más joven de sí misma, pero el premio fue para la joven estrella de ‘Anora’.
Al respecto, una fuente declaró a Page Six: «Demi tomó muy mal esta derrota porque sentía que por fin era su oportunidad de llevarse a casa un Óscar».
Demi y Mikey estaban nominados junto a Fernanda Torres por ‘I’m Still Here’, Karla Sofía Gascón por ‘Emilia Pérez’, y Cynthia Erivo por ‘Wicked’.
La fuente añadió a Page Six: «Demi tenía muchas esperanzas de obtener la victoria. Está emocionada por Mikey y por todas las otras mujeres que estaban nominadas, pero por supuesto, fue una gran decepción no escuchar su nombre».
También se dijo que muchos asistentes a la fiesta de los Óscar de Vanity Fair se acercaron a Demi para ofrecerle apoyo y elogios por su actuación.
Un vídeo compartido en X mostraba a Demi visiblemente tensa cuando se anunció el nombre de Mikey.
La joven de 25 años subió al escenario para aceptar el premio y describió el momento como «muy surrealista».
Dijo: «Crecí en Los Ángeles, pero Hollywood siempre me pareció muy lejano, así que estar aquí, de pie en esta sala hoy, es realmente increíble».
La estrella de ‘Scream’ también rindió homenaje a sus compañeros nominados: «También quiero reconocer el trabajo reflexivo, inteligente, hermoso e impresionante de mis compañeros nominados. Es un honor ser reconocida junto a todos ustedes».
Concluyó su discurso diciendo: «Esto es un sueño hecho realidad. Probablemente me despierte mañana».
