Blue Origin, empresa de transporte aeroespacial de Jeff Bezos, anunció este lunes que el actor canadiense William Shatner, famoso por encarnar a James T. Kirk, capitán de la nave Enterprise en la serie y películas de ‘Star Trek’, estará a bordo de la nave de la compañía en el próximo vuelo al espacio, a celebrarse el próximo 12 de octubre, recoge CNN.
El vuelo de la nave New Shepard NS-18 durará 11 minutos y pasará la línea de Kármán, límite del espacio reconocido internacionalmente. «He oído hablar del espacio durante mucho tiempo», señaló Shatner en un comunicado. «Aprovecho la oportunidad para verlo con mis ojos. Qué milagro», sostuvo. De este modo, se convertirá en la persona más longeva jamás lanzada al espacio.
Anteriormente, se informó que la misión será filmada para un documental. Es más probable que el viaje de Shatner sea financiado por Bezos, lo que sería «un paso inteligente» del fundador de Blue Origin. Cabe recordar que el asiento civil para la primera expedición fue vendido por más de 20 millones de dólares.
Blue Origin lanzó su primer vuelo civil el 20 de julio pasado. En la nave viajaron Jeff y, su hermano, Mark Bezos, el adolescente holandés Oliver Daemen, de 18 años, quien se convirtió en la persona más joven en ir al espacio; y la aviadora Wally Funk, quien a sus 82, era la persona más longeva en realizar un viaje espacial, pero eso cambiaría en los próximos días con el vuelo de Shatner.

El padre de Daemen, Joes, quien fundó la firma privada Somerset Capital Partners, pagó más de US$20 millones en una subasta para que su hijo pudiera ocupar un asiento en la nave, que era la primera que llevaba civiles al espacio.
En diálogo con la cadena NBC, Shatner habló sobre la nueva carrera espacial de Bezos: “Sé que se puede argumentar sobre la popularización de los viajes espaciales, y hablé con muchos viajeros espaciales que están emocionados de llegar a Marte”. Sin embargo, el actor calificó de “ridícula” la ambición de llegar al “planeta rojo” por el tiempo que lleva y las condiciones a las que debe someterse la tripulación. “Se necesita un año y medio para llegar allí. La gente pensará que es como si estuviéramos en un viaje, en una línea de cruceros. ¡Ningún hombre! Estás en gravedad cero, hace más calor que el infierno y el aire está podrido. ‘¡Ayudame, me muero, pero me muero lentamente!’ Qué destino tan terrible”, exclamó.