Brendan Fraser regresó al ojo público gracias a su labor en La Ballena, misma que seguramente le dará la estatuilla como Mejor Actor en la próxima ceremonia del Oscar. La cinta de Darren Aronofsky se convirtió en la vía perfecta para el gran regreso del intérprete, quien siguió trabajando por años pero ya sin la popularidad que alguna vez caracterizó su carrera. Ahora que el enfoque está nuevamente en su trabajo, él está listo para hablar de todas esas cosas que lo llevaron a alejarse de los medios y esos otros trabajos que complicaron mucho su futuro en la industria. Fraser recuerda con mucho cariño y agradecimiento la cinta de La Momia , pero también reconoce que la filmación fue muy dura y hasta hubo un momento en el que casi muere por un error.
La Momia no funcionó muy bien con la crítica de esa época, pero el público quedó realmente encantado con esta nueva versión que dejaba el horror en segundo plano para entregarnos una aventura más clásica y al mejor estilo de las películas de Indiana Jones. Brendan Fraser y Rachel Weisz encontraron la fama gracias a esta producción y decidieron volver para La Momia Regresa, secuela que nuevamente no fue bien recibida por los especialistas, pero logró satisfacer a los fans y les dio mucho material para admirar por años.
The Mummy: Tomb of the Dragon Emperor resultó un fracaso en todos los sentidos y aunque Fraser regresó como protagonista, las cosas ya no se sentían igual sin Weisz y pasando a otra historia lejos de Egipto. Esta tercera entrega no logró convencer a los seguidores, quienes todavía esperan una nueva historia que regrese a las raíces que funcionaron tan bien al principio. El remake de Tom Cruise sólo reafirmó la lealtad hacia el canon original y ahora que Fraser tiene toda la atención algunos creen que es momento perfecto para retomar la franquicia.
En estos momentos, es poco probable que esta petición se cumpla, pues el panorama ha cambiado mucho en los últimos años. Es verdad que Hollywood lleva tiempo siguiendo una tendencia clara sobre explotar la nostalgia del público, por lo que no es raro ver secuelas tardías, reboots, spin-offs, precuelas o las llamadas recuelas, pero el caso de La Momia es complicado. Para empezar, es poco probable que Rachel Weisz quisiera regresar y Maria Bello, quien la reemplazó en la tercera película, no fue muy aceptada por los fans, así que tampoco sería una opción. Por otro lado, una producción así de complicada no parece ser algo que Brendan Fraser pueda hacer en este punto de su carrera.
Brendan Fraser es el primero en reconocer lo importante que es La Momia en su carrera, y en varias entrevistas ha dicho que con el guion correcto él estaría dispuesto a regresar para otra entrega. Sin embargo, también ha sido muy abierto sobre los peligros y los diversos problemas de salud que se originaron aquí. El actor ya ha hablado del abuso que sufrió dentro de la industria, pero esa no fue la única razón por la que dejó de protagonizar cintas de aventura y acción, que eran los géneros que mejor dominaba. Al parecer, durante la filmación de estas películas, Fraser llevó a su cuerpo al límite y se lastimó de manera permanente, por lo que pasó años tratando de superar el dolor con el que tenía que vivir a diario.
Además, durante la filmación se presentaron ciertos momentos que fueron genuinamente aterradores y peligrosos para el actor, quien trató de hacer la mayoría de sus stunts. Durante una aparición en The Kelly Clarkson Show (vía ComicBook.com), Fraser reveló:
«Me ahorcaron accidentalmente en la secuencia del ahorcamiento. Estaba parado de puntillas así, con la cuerda [alrededor de mi cuello], y solo llegaba hasta cierto punto. Y [el director Stephen Sommers] corrió y me dijo: ‘Oye, realmente no parece que te estás, ya sabes, asfixiando, ¿puedes mejorarlo? Y yo estaba como: ‘Está bien, está bien’. Así que pensé: ‘Una toma más, hombre»
«La cámara se movió en picado y me puse de puntillas, y el tipo que sostenía la cuerda por encima de mí tiró de ella un poco más y me quedé atrapado de puntillas. No tenía adónde ir más que hacia abajo, así que él estaba subiendo y yo bajando. Lo siguiente que supe fue que mi codo estaba en mi oído, el mundo estaba de lado, había grava en mis dientes y todos estaban muy callados«,
Fraser también recuerda que después del hecho el coordinador de stunts le dijo que lo mismo le había pasado a Mel Gibson en Corazón Valiente , algo que el actor trató de tomar con un poco de humor, a pesar de estar angustiado. Esta escena es sólo uno de tantos ejemplos donde el intérprete puso a prueba su integridad física, y años de hacer lo mismo dejaron serias secuelas en su cuerpo, por lo que no suena probable que pueda o quiera regresar a una franquicia de acción de este tipo.