“Una enfermera —recuerda Adrián Uribe— me dijo que un día me saludó (en la calle) y ni siquiera volteé a verla pero que ahora ¡me estaba bañando!; nunca se sabe que va a pasar”. Entre abril y mayo, el comediante estuvo internado en terapia intensiva por una oclusión intestinal, en donde fue sometido a tres operaciones y al retiro de 50 centímetros de intestino delgado.
Pensó que no saldría vivo y fue en uno de esos momentos, ya en recuperación, que reflexionó sobre la vida y platicó con la enfermera. “La vida sigue rodando contigo y sin ti, no todo es trabajo, siempre he tratado de convivir y darle tiempo a mi familia, y ahora más. Lo que sueñas de pronto se acaba, nadie sabe cuándo, ahora he tratado de ser mejor humano.
“Nunca he menospreciado a la gente, siempre doy tiempo, pero estando ahí pensaba que quería caminar y que me pidieran más fotos”, señala de buen humor.
Ayer, Uribe partió a Rusia, invitado por Televisa, para pasar una semana de vacaciones y ver el partido de octavos de nal entre México y Brasil.
Aclara que no irá a trabajar, aunque sí tendría una participación breve antes del encuentro. “Se especuló mucho que casi iba a rescatar (la parte de comedia para la televisora) y esas cosas que de repente la prensa amarillista dice, pero yo voy como invitado por la empresa, invitado por los ejecutivos, realmente a una semana de vacaciones con mi hijo”, subraya.
A pregunta expresa, el creador de Poncho Aurelio y El Vítor dice que buscará la manera de emitir su voto este domingo, para elegir presidente de la República.
“Estamos investigando, yo llevo todos los papeles posibles”, destaca. Informa que para este año tiene pláticas para una película y un nuevo show de los que hablará posteriormente. A Rusia ya va con el alta médica y unas medicinas para seguir cuidándose.