Este domingo 11 de agosto se cumplen 10 años de la muerte de Robin Williams. Se trata de uno de los actores y comediantes más queridos de las últimas décadas, que tuvo un final trágico. Hoy en día se lo recuerda a partir de algunas de sus mejores actuaciones, por las cuales se destacó con sus comiquísimas interpretaciones, pero también supo tener roles dramáticos.
Robin McLaurin Williams nació el 21 de julio de 1951 en Chicago, Estados Unidos. Su interés por la actuación surgió ya de grande, cuando decidió abandonar la carrera de ciencias políticas para avocarse a este arte. Esto lo llevó a la prestigiosa academia de interpretación Juilliard en Nueva York. Tras su graduación, se instaló en San Francisco para meterse en el mundo teatral.
Su primer gran rol fue en Mork & Mindy, una serie de televisión en la que interpretaba a un extraterrestre. Su carisma y humor lo llevaron a tener un gran éxito que lo lanzó a la fama. El show duró varios años, pero eventualmente Williams dio el paso al costado para probarse en otro rubro: el cine.
En ese contexto, dio actuaciones muy divertidas que lo hicieron ganarse el amor del público. Sin embargo, no quería ser encasillado solamente como cómico. Es así que tomó papeles más serios y arriesgados que probaron su gran versatilidad como actor. Su mayor logró fue ganar el premio Oscar a Mejor actor de reparto en 1998, por su rol en Mente indomable.
A pesar de siempre mostrarse alegre y agradable ante las cámaras, Robin Williams tuvo una dura lucha contra su adicción a las drogas y alcohol. Él mismo ha contado que la presión que sufría al inicio de su carrera en el stand up lo llevaron a empezar a consumir y varias veces pasó por rehabilitación.
Un día como hoy, pero del 2014, el muy querido actor fue encontrado muerto en su domicilio ubicado cerca de Paradise Cay, California. Tenía 63 años. Se determinó que la causa de su fallecimiento había sido un suicidio por asfixia. Unos días después, su esposa informó que el actor había sido diagnosticado unos años antes con Parkinson, algo de lo cual Robin nunca había hablado en público y lo sumió en una depresión. Sin embargo, su autopsia confirmó que en realidad se trataba de demencia con cuerpos de Lewy, los síntomas de esta enfermedad son similares a esta afección y los del Alzheimer.
Según informaron su viuda e hijo, Zac Williams, el artista había sufrido perdida de memoria, paranoias, ataques de ansiedad, entre otras alteraciones que lo alejaron de la actuación, su gran pasión. Esto no ayudó a su salud mental y lo sumió en una crisis que lo llevó a quitarse la vida. Lamentablemente, se trata de una enfermedad que solo se puede conocer el diagnóstico una vez que la persona que la padece muere.
La noticia sacudió al mundo del espectáculo mundial y hoy en día su pérdida sigue siendo una gran tristeza. Sin embargo, dejó un gran abanico de personajes que siguen alegrando a sus fanáticos. A continuación, 10 de las películas más recordadas de Robin Williams.
La sociedad de los poetas muertos
Se trata de unos de los roles más queridos de Robin Williams, en una película totalmente conmovedora que se estrenó en 1989. Allí se puso en la piel de un profesor de literatura poco convencional que inspiraba a sus alumnos a adentrarse en el mundo de la poesía. Muchos la recuerdan por la famosa frase “Oh capitán, mi capitán”, que se volvió icónica en la historia del cine.
Jumanji
Es uno de los mayores éxitos de taquilla que tuvo el actor: recaudó casi 263 millones dólares, con un presupuesto de 65 millones. Se trata de un juego de mesa de temática selvática que cobra vida y somete a sus jugadores a peligrosas pruebas. Williams interpretaba a Alan Parrish, un joven que por años quedó atrapado en el tablero. Estrenada en 1995, el largometraje se destacó por su acción, banda sonora y efectos especiales, que para la época fueron bastante avanzados.
Papá por siempre
También conocida como Mrs. Doubtfire, esta es una de las películas con la cual Robin Williams se ganó el corazón de muchos con su comicidad. Se trata de un actor divorciado que pierde la tenencia de sus hijos y que decide disfrazarse de una niñera anciana para poder verlos más seguido.
El hombre bicentenario
Esta cinta de 1999 de ciencia ficción navega sobre varias cuestiones de la humanidad, como el amor, la muerte y la libertad. Sigue a un androide llamado Andrew Martin que tiene la función de trabajar como un robot de hogar para hacer las tareas domésticas de una familia. Sin embargo, este empieza a experimentar emociones y pensamientos creativos como un humano.
Aladdín
Williams no puso su cuerpo en este caso, pero le dio su voz al Genio de la Lámpara en la versión en inglés de este film de 1992. Este es liberado por Aladdín tras frotar este artefacto que encontró en una cueva. A cambio, él se ofrece a cumplirle tres deseos. La excentricidad y humor del actor se transfirieron a él, lo que lo convierte en uno de los favoritos de los fanáticos de Disney.
Patch Addams
Esta película está basada en hechos reales y cuenta la historia del Dr. Hunter “Patch” Adams, quien cuestionó los métodos para tratar a los pacientes con graves enfermedades hasta el punto de revolucionar el mundo de la medicina. El intérprete le dio mucho afecto y calidez a esta historia inspiradora.
Hook, el retorno del Capitán Garfio
Esta es otra de las películas infantiles que protagonizó el oriundo de Chicago. En ella interpretaba nada menos que a Peter Pan, pero en una versión donde este abandona el País de Nunca Jamás y se vuelve un adulto. De todos modos, él debe volver allí para rescatar a sus hijos, que fueron capturados por el Capitán Garfio.
Mente indomable (o En busca del destino)
Con este film, Robin Williams obtuvo uno de los mayores premios que puede obtener un actor en la cinematografía: el premio Óscar. Lo logró al ponerse en los zapatos de Sean Maguire, un psicólogo que intenta ayudar a un joven brillante interpretado por Matt Damon para que se comporte apropiadamente y pueda alcanzar un futuro mejor.
Buenos días, Vietnam
En 1987, Robin Williams encabezó esta cinta, que fue una de las primeras veces en que mostró su versatilidad actoral. Está basada en la experiencia del aviador y locutor estadounidense Adrian Cronauer ―a quien interpretó el actor― durante la guerra de Vietnam. Este era un locutor de radio que entretenía a los solados, pero que sus superiores eventualmente expulsaron por sus comentarios “poco convencionales”.
Una noche en el museo
Para terminar con este listado, está la trilogía cómica que encabezó con Ben Stiller. En las tres películas, Robin interpretaba a una estatua de cera del presidente estadounidense Theodore Roosevelt, quien cobraba vida una vez que bajaba el sol. Su interpretación en Una noche en el museo: el secreto de la tumba fue su última actuación cinematográfica.