Varias explosiones fuertes y se reportaron este martes cerca a una base aérea militar rusa en Novofedorivka, en el oeste de Crimea, así como una densa columna de humo negro. El Ministerio de Defensa ruso informó que se trató de explosión de municiones y, aunque en principio había negado que hubiera lesionados, el gobernador local Sergey Aksyonov confirmó que murió al menos una persona y otras cinco resultaron heridas.
Las imágenes compartidas en las redes sociales también mostraban una columna de humo en la zona y el momento de una gran explosión que provocó altas llamaradas visibles a larga distancia.
En el transcurso de un minuto se escucharon al menos 12 explosiones de diversa intensidad, según dos testigos consultados por Reuters. Tres de ellas fueron especialmente fuertes y provocaron fuego y humo.
En un comunicado, las autoridades indicaron que el equipo de aviación no resultó dañado. El diario The New York Times publicó una declaración atribuida a un alto oficial ucraniano en la que asegura que se trató de un ataque planificado por fuerzas de Kiev, mientras que Moscú lo atribuye en principio a un accidente.
El gobernador Aksyonov indicó que como primera medida se estableció un perímetro de cinco kilómetros para reducir posibles riesgos a los residentes locales. Al menos 30 personas fueron evacuadas.
Previamente, funcionarios locales se refirieron a los hechos. “Por ahora, solo puedo confirmar que varias explosiones en el área de Novofedorovka. Les pido esperar por los reportes oficiales”, dijo en Telegram Oleg Kryuchkov, asesor del gobierno local.
Viktoria Kazmirova, miembro del gobierno del distrito de Saki (donde queda la bae), relató que el lugar estaba explotando y que todas las ventanas del lugar estaban rotas por las ondas expansivas.
Según detalló Tass, el aeródromo se utiliza como base de la aviación del Ministerio de Defensa, para aviones y helicópteros, incluida la aviación naval. También, hay un complejo de entrenamiento de pruebas para practicar el despegue y el aterrizaje de aviones navales.
La base de Saki ha permitido que los aviones de guerra rusos estacionados allí atacaran zonas del sur de Ucrania con poca antelación.
Rusia alquiló durante décadas el puerto naval de Sebastopol, sede de su Flota del Mar Negro, a Kiev, pero se anexionó toda la península de Ucrania en 2014 tras organizar un referéndum. La gran mayoría de la comunidad internacional no reconoció los resultados de esa votación.
La península, que sigue bajo control ruso y es un popular destino turístico, se ha librado de los intensos bombardeos y combates de artillería que han tenido lugar en otras zonas del este y el sur de Ucrania desde el 24 de febrero, cuando el presidente Vladimir Putin ordenó la entrada de las fuerzas armadas rusas en Ucrania.
