Un fatal accidente en el que perdieron la vida cuatro personas adultas, un niño y un feto (una de las víctimas estaba embarazada), quedó registrado por cámaras de seguridad en calles de Los Angeles, California, en los Estados Unidos. El choque fue provocado por una conductora que ignoró los señalamientos y cruzó una avenida en rojo impactado a los vehículos que transitaban.
El hecho ocurrió en la intersección de Slauson Avenue y La Brea Avenue cerca de las 13:40 horas de este jueves 04 de agosto, en el área de Windsor Hills al oeste de la metrópoli. Además de las víctimas mortales, nueves personas más resultaron con lesiones y de las cuales ocho fueron trasladas al centro médico Ronald Reagan.
Además, al menos seis automóviles resultaron dañados, tres de ellos fueron consumidos por el fuego tras el choque. De acuerdo con las autoridades, la responsable se trata de una mujer de alrededor de 40 años de edad que manejaba a exceso de velocidad (más de 150 kilómetros por hora) y aunque su estado de salud fue reportado como grave, se encuentra con vida.
“Es un accidente que yo he mirado que fue muy grave. Nunca había visto un accidente como este. Durante la investigación encontramos que fueron seis víctimas que fallecieron en el hecho” comentó Jaime González, vocero de la Patrulla de Caminos de California (CHP, por sus siglas en inglés).
Según lo narrado por el oficial González, al inició de las indagaciones fueron registradas seis cuerpos sin vida. No obstante, con el desarrollo de las mismas un sexto cadáver fue hallado más tarde en la propia escena. Y es que, la víctima se encontraba dentro de uno de los vehículos que se incendiaron y su cuerpo fue parcialmente calcinado.
Una testigo del accidente contó para la cadena CBS: “De repente, escuché una gran explosión y las llamas cubrieron todo mi auto. Pensé que mi auto estaba en llamas”. Otra más comentó: “Estaba a punto de poner gasolina y de repente, escuché todos los ruidos de todas las colisiones, y luego la explosión del fuego y vi cosas, metal y cosas volando en el aire. Así que me cubrí detrás”.
