La NASA y La compañía SpaceX enviaron con éxito este domingo desde Cabo Cañaveral (Florida) la primera misión operativa tripulada a la Estación Espacial Internacional (EEI) desde suelo estadounidense, luego de que el mal tiempo a causa de la tormenta tropical Eta obligara a posponerlo por casi 24 horas.
Un cohete Falcon 9 de SpaceX con la cápsula Dragon encima despegó desde el Centro Espacial Kenndy un día después después de lo previsto. Es decir, a las 19.27 hora local del domingo 15 de noviembre (00.27 horas GMT del lunes 16), con cuatro astronautas a bordo: Shannon Walker, Michael Hopkins, Victor Glover, y Soichi Noguchi.
Una vez se separe del cohete, que es reutilizable, la cápsula, bautizada como Resilience para esta misión, arribará a la EEI sobre las 23.00 horas del lunes (4.00 GMT del martes).
Se trata del segundo vuelo tripulado de SpaceX, una empresa privada fundada por el empresario Elon Musk, que ahora llevará astronautas de la NASA al espacio después de nueve años de dependencia estadounidense de los cohetes rusos Soyuz
La misión debió postergarse un día, estaba prevista para ayer sábado, debido al mal tiempo que ha generado la tormenta tropical Eta, que el jueves cruzó toda la parte norte de Florida y prosiguió su trayecto en aguas del Atlántico tras dejar fuertes inundaciones en este estado.
Según señalaron los directivos de la misión, las condiciones meteorológicas no ofrecían garantías para que la plataforma que debe recibir al cohete Falcon 9 llegara a su posición en el Océano Atlántico.
Está previsto que una parte del cohete sea usado nuevamente en la próxima misión tripulada a la estación espacial de la NASA y SpaceX, a efectuarse en marzo.
«El clima era tal debido a esta tormenta tropical, que no pudimos hacer que el drone (plataforma) saliera a tiempo y llegara allí”, señaló en rueda de prensa en Cabo Cañaveral el director del Programa de Vuelos Espaciales Tripulados de Space X, Benji Reed.
A su turno, Steve Stich, del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, señaló que la primera etapa del cohete Falcon 9 que se usará en el vuelo de la misión Crew-1 será reutilizada para “la misión Crew-2 que se avecina en la primavera”.
A bordo de la cápsula viajan una astronauta de la agencia espacial de EEUU, Shannon Walker, y dos colegas varones, Michael Hopkins y Victor Glover, además del astronauta japonés Soichi Noguchi, los cuales serán recibidos en la EEI por Kate Rubins, de la NASA, y los rusos Sergey Ryzhikov y Sergey Kud-Sverchkov.
Los cuatro astronautas están desde hace días en el Centro Espacial Kennedy y el jueves subieron a la nave para una serie de pruebas antes del lanzamiento.
Esta es la primera de las al menos seis misiones que SpaceX realizará a la EEI en razón de un contrato de 2.600 millones de dólares firmado con la NASA en 2014, y que incluye vuelos tripulados y otros de carga.
El administrador de la NASA, Jim Bridenstine, dijo el vienes que el objetivo final de misiones como la Crew-1 es “tener más recursos para hacer cosas para las que aún no hay un mercado comercial, como ir a la Luna y a Marte bajo el programa Artemisa”.
“Cuando tengamos más astronautas, un reemplazo completo en la Estación Espacial Internacional, la cantidad de investigación que va a producir va a ser transformadora”, agregó.
La misión Crew-1 fue precedida por el histórico viaje de prueba Demo-2, iniciado el pasado 30 de mayo.
En aquella misión, Bob Behnken y Doug Hurley viajaron a la EEI y al cabo de dos meses regresaron a la tierra en la misma cápsula, que cayó en el Golfo de México de manera controlada y sin problemas el 2 de agosto pasado.
La misión Crew-1, de seis meses de duración, debía haberse iniciado originalmente el 23 de octubre, pero fue aplazada al 31 de octubre y luego sin fecha hasta que la NASA anunció a fines de septiembre que sería el 14 de noviembre. El viernes, dio a conocer que se postergaba para el día 15.
El penúltimo aplazamiento se debió a que se descubrió un problema en los motores del cohete Falcon 9 durante un vuelo no relacionado con el programa de la NASA.