Ucrania anunció el miércoles que Rusia bombardeó más de cien localidades en las últimas 24 horas, el mayor número en un solo ataque este año.
Desde que iniciaron su ofensiva en febrero de 2022, las fuerzas rusas dispararon millones de proyectiles de artillería sobre las ciudades y pueblos ucranianos situados cerca del frente, dejando varios en ruinas en el este del país.
«En las últimas 24 horas, el enemigo bombardeó 118 localidades en diez regiones», declaró en un mensaje publicado en redes sociales el ministro ucraniano del Interior, Igor Klimenko.
«Se trata del mayor número de ciudades y pueblos en sufrir un ataque desde principios de año», agregó.
Un ataque ruso a una refinería de petróleo en Kremenchuk (centro), no dejó víctimas, pero requirió la actuación de más de un centenar de bomberos para luchar varias horas contra el consecuente incendio, según Klimenko.
Ucrania y sus aliados occidentales temen que Rusia intensifique sus ataques contra infraestructuras energéticas del país antes del duro invierno, como el año pasado.
Los bombardeos nocturnos dejaron un muerto en la región de Járkov (noreste) y otro en la región de Jersón (sur), indicaron responsables locales. Una tercera persona murió y otras cuatro resultaron heridas por un ataque ruso con dron en Nikopol, en el sur del país.
La Fuerza Aérea ucraniana anunció por su parte el miércoles que derribó 18 de los 20 drones rusos lanzados por la noche.
Por otro lado, el ministerio ruso de Defensa afirmó haber derribado dos drones ucranianos sobre las regiones de Briansk y de Kursk, fronterizas con Ucrania.