En una victoria temprana para Twitter, una jueza ordenó este martes que la demanda de la compañía contra Elon Musk por su acuerdo de adquisición de US$ 44.000 millones irá a un juicio de cinco días en octubre.
La decisión se tomó al final de la primera audiencia del caso sobre si el proceso debía acelerarse. Días después de que Musk buscara rescindir el acuerdo, Twitter presentó la demanda la semana pasada e incluyó una moción para acelerar el proceso. También solicitó un juicio de cuatro días en septiembre. El equipo legal de Musk se opuso a la moción.
El abogado principal de Twitter, William Savitt, arremetió contra Musk al comienzo de la audiencia, cuando argumentó a favor de un juicio rápido. Savitt dijo que la continua incertidumbre que se cierne sobre la empresa por el acuerdo en vilo y el litigio «afecta a Twitter todos los días, cada hora y cada día». También destacó lo que describió como el continuo menosprecio de Musk hacia Twitter, incluso en su propia plataforma.
«Musk ha estado y sigue estando obligado por contrato a hacer sus mejores esfuerzos para cerrar este trato», sostuvo Savitt. «Lo que está haciendo es exactamente lo contrario: es sabotaje».
Por su parte, el abogado de Musk, Andrew Rossman, respondió diciendo que el multimillonario «no tiene ningún incentivo para mantener este asunto pendiente por mucho tiempo». También dijo que Musk sigue siendo uno de los mayores accionistas de Twitter. Y señaló que la compañía no demandó a su cliente por supuestas violaciones del acuerdo hasta después de que él tomó acciones para rescindirlo, lo que sugiere que la espera de la empresa invalida su deseo de un proceso rápido. El equipo de Musk ha propuesto que la disputa vaya a juicio a principios del próximo año.
«No nos oponemos a la rapidez y al punto final, no estamos pidiendo años aquí», dijo Rossman. «Lo que estamos ofreciendo, en cambio, su señoría, es un cronograma increíblemente rápido y sensato».
Tras el argumento de cada parte, la jueza que supervisa el caso en Delaware, Kathaleen St. Jude McCormick, dijo que el equipo de Musk «subestima la capacidad de esta corte… para procesar rápidamente litigios complejos».
Incluso con esta disputa sobre el plazo para resolver la demanda, Twitter tenía mucho en juego. La compañía ya enfrentaba dificultades para hacer crecer su base de usuarios y su negocio de publicidad antes de que Musk se involucrara. Y ahora la empresa, así como muchas otras compañías tecnológicas, está reduciendo los costos en medio de una inflación desenfrenada y los temores de una recesión.
Twitter necesita una resolución rápida en la batalla contra Musk para limitar la incertidumbre de sus accionistas, empleados y clientes. Así como cualquier consecuencia para su negocio que podría verse exacerbada por un litigio costoso y prolongado.
Aunque la audiencia de este martes fue en gran medida de procedimiento, permitió una mirada a cómo cada parte puede abordar lo que probablemente sea un proceso complicado. También puede dar una idea de cómo la jueza que supervisa el caso está abordando la disputa.
Musk es un racista basura hijo de blancos racistas de Sudáfrica….