El presidente estadounidense, Donald Trump, canceló este sábado su plan de celebrar la próxima cumbre de líderes del G7 en su propio club de golf en Miami ubicado en Florida, tras una fuerte polémica por los beneficios que habría supuesto para su organización empresarial acoger allí la cita.
“Debido a la Loca e Irracional Hostilidad de los Medios de comunicación y los Demócratas, ya no consideraremos Trump National Doral, en Miami, como la sede (de la cumbre) del G7 en 2020″, escribió Trump en su cuenta de Twitter a última hora del sábado.
“Empezaremos inmediatamente a buscar otro lugar, incluida la posibilidad de (la residencia presidencial oficial de) Camp David (Maryland). ¡Gracias!”, agregó.
“Comenzaremos la búsqueda de otro sitio, incluida la posibilidad de Camp David, de inmediato”, acotó
El jefe de gabinete interino, Mick Mulvaney, había dicho el jueves que el club en Florida era “el mejor” lugar entre una docena de lugares consideradas para la cita a realizarse entre el 10 y el 12 de junio de 2020.
El viernes, los demócratas presentaron en el Congreso un proyecto de ley para bloquear esos planes. Los opositores ya abrieron una investigación con miras a un juicio político contra Trump por presuntamente haber presionado a Ucrania para interferir a favor de su reelección en las elecciones de 2020.
Minimizando cualquier cuestionamiento ético o legal, Trump había asegurado que, con la cumbre del G7 en su resort, no percibiría “nada” de ganancias.
Comprado por el magnate en 2012, el Trump National Doral Golf Club se presenta en su sitio en internet como un “oasis tropical” que ofrece más de 600 habitaciones, incluidas dos “suites presidenciales” y un gran salón de baile bautizado como “Donald J. Trump”.
“Tiene un área considerable, cientos de hectáreas, por lo que podemos realizar cualquier evento en el lugar”, había afirmado Trump en Biarritz. “Está justo al lado del aeropuerto (…) y cada delegación puede tener su propio edificio”. “Es un sitio formidable”.