Un anciano de 75 años fue dado de alta esta semana en el Hospital Mercy en Oklahoma City, EE.UU., tras 99 días de lucha contra el covid-19. No obstante, cuando despertó del coma, sus hijas tuvieron que darle una mala noticia: su esposa, Judy, había fallecido por el mismo virus, informa la cadena local KFOR-TV.
«Puedo contar qué estábamos haciendo el día antes de enfermar, pero después todo está simplemente en blanco», afirmó el hombre.
En marzo, Owens necesitó la asistencia de un respirador artificial y confiesa que no recuerda nada del primer mes que estuvo en el hospital. Al mismo tiempo, su esposa Judy, de 73 años, también dio positivo por coronavirus y fue admitida un día antes que Owens en el nosocomio. Al igual que él, estaba en coma.
La mujer falleció una semana más tarde. «Me contaron que tuve malas noches llamando a mi esposa», contó sobre aquel momento el anciano.
El matrimonio vivió 52 años juntos. «Siendo un hombre viejo he pasado por muchas cosas, pero nunca pensé que esto podía suceder», aseguró Owens.
El hombre perdió 30 kilos durante la enfermedad, y todavía no está claro si el virus dejará secuelas permanentes en su salud.
Ahora debe caminar con asistencia de un dispositivo ortopédico y realiza una terapia física. El mayor objetivo por el momento es recuperar la masa muscular y poder desplazarse sin inconvenientes.
