Las intensas lluvias que azotaron México durante la primera semana de octubre han dejado al menos 64 muertos y 65 desaparecidos, según reportes oficiales.
Los estados más afectados son Veracruz, Hidalgo y Puebla, donde se han registrado los mayores números de víctimas fatales.
Las lluvias, originadas por los remanentes de los huracanes Priscilla y Raymond, provocaron desbordamientos de ríos, deslizamientos de tierra e inundaciones en más de 100 municipios. Se estima que alrededor de 100,000 viviendas han sido afectadas y más de 42,000 personas se encuentran sin electricidad.
Las autoridades han intensificado las labores de rescate y asistencia humanitaria, enfrentando desafíos debido a las condiciones climáticas adversas y la infraestructura dañada.
Se han establecido centros de acopio y se han enviado suministros de emergencia a las zonas más afectadas.