La pandemia de coronavirus provocará niveles «devastadores» entre la población de alrededor de 25 países, la mayoría de ellos africanos, durante los próximos meses, según un informe publicado este viernes por el Programa Mundial de Alimentos (OMS) y la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
“Hace tres meses dije a los líderes mundiales ante el Consejo de Seguridad de la ONU que corríamos el riesgo de una hambruna de proporciones bíblicas”, ha indicado el director ejecutivo del PMA, David Beasley, quien ha incidido en que los datos revelan que “desde entonces, millones de las familias más pobres del mundo se han visto forzadas a estar aún más cerca del abismo”
Así, ha explicado que “los sustentos están siendo destruidos a un ritmo sin precedentes y ahora sus vidas están ante un peligro inminente de hambruna”. “Que no haya errores, si no actuamos ahora para poner fin a esta pandemia de sufrimiento humano, mucha gente morirá”, ha agregado.
La mayoría de los países afectados se encuentran en África, si bien la alerta se extiende igualmente a países de América Latina y el Caribe, Medio Oriente y Asia, motivo por el que el PMA ha indicado que incrementará su entrega de ayuda humanitaria a 138 millones de personas, una cifra sin precedentes.
El coste de esta respuesta se calcula en torno a los 4.900 millones de dólares , con otros 500 millones de dólares destinados a evitar brotes de hambre en los países que están ante un mayor riesgo.
La cifra supone más de la mitad del Plan de Respuesta Humanitaria Internacional ante la COVID-19, lanzado ayer para recaudar 10.000 millones de dólares (unos 8.745 millones de euros), el mayor llamamiento en petición de ayuda de la ONU hasta la fecha.
Los citados organismos han detallado que las personas en situación de inseguridad alimentaria grave en los países en riesgo podría aumentar de 149 millones a 270 millones antes de que acabe el año si esta ayuda no es distribuida de forma urgente.
Además, ha alertado de que sus cálculos apuntan a que cerca de 6.000 niños podrían morir al día por causas prevenibles durante los próximos seis meses a causa de las alteraciones provocadas por la pandemia en los servicios básicos de sanidad y nutrición.
La alerta emitida por estos organismos afecta principalmente a África, donde se verían afectados un total de 15 países: Burkina Faso, Camerún, Etiopía, Liberia, Malí, Mozambique, Níger, Nigeria, República Centroafricana (RCA), República Democrática del Congo (RDC), Sierra Leona, Somalia, Sudán, Sudán del Sur y Zimbabue.
En el caso de África Oriental, han recordado que ya antes de la pandemia había 27,6 millones de personas en situación de inseguridad alimentaria grave, además de hacer frente a la peor plaga de langostas del desierto en 25 años y haber sufrido graves inundaciones entre marzo y mayo que afectaron a cerca de 1,3 millones de personas.
Por su parte, 12,3 millones de personas residentes en África Occidental se encontraban en situación de crisis en diciembre de 2019, incluidos los países del Sahel, que han sido escenario de un grave repunte de la inseguridad durante los últimos meses debido al incremento de los ataques yihadistas y los enfrentamientos intercomunitaros.
De esta forma, ha destacado que la región de Liptako-Gourma, en la frontera entre Burkina Faso, Malí y Níger, es uno de los puntos más preocupantes en la región, afectada además por el creciente número de refugiados y desplazados internos que huyen del conflicto y la violencia.
En el sur de África, marcado por las sequías e inundaciones recientes, tanto Mozambique como Zimbabue hacen frente a un empeoramiento de la ya complicada situación humanitaria, mientras que RCA y RDC cuentan además con conflictos activos en varias zonas del país que endurecerán el sufrimiento de la población.
Los organismos han incluido además en su previsión de países afectados a Afganistán, Bangladesh, Irak, Líbano, Siria y Yemen, en el caso de Asia, y Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Nicaragua, Perú y Venezuela en la región de América Latina y Caribe.
En el Salvador el responsable es el ejecutivo q ha destruido la economía y la democracia, tiranos vulgares
Los países desarrollados pueden dejar de producir armas y envíen esos recursos a los países más pobres
Y los revergos de comida que botan los países desarrollados, egoístas, enfermos mentales?
Vaya estamos en la lista. Pero con este Gobierno y Bukele al frente, habrá comida para todos.
Y para variar aparece El Salvador jajaja. Uta mano, no hay duda que el nombre de este país es como un sarcasmo a la máxima potencia jajaja.
Todo esto gracias a los gobiernos de los últimos 30 años, que el pueblo los obligará a devolver todos los millones de dólares que se han robado.