El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, presenta «todos los síntomas de tortura psicológica» a causa de una campaña de difamación por parte de medios de comunicación, autoridades judiciales y políticas, según concluyó este viernes el relator especal de la ONU para casos de tortura.
Nils Melzer, quien desempeña como Relator Especial de las Naciones Unidas sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, visitó a Assange el pasado 9 de mayo en una cárcel de alta seguridad de Londres donde cumple condena por haber incumplido en 2012 las condiciones de libertad condicional, para refugiarse en la Embajada de Ecuador.
El entorno de Assange ha denunciado una afectación de la salud del australiano y la han atribuido a la reclusión durante casi siete años en la embajada ecuatoriana y a las presiones infligidas. Acompañado por dos médicos, Melzer ha constatado que es «obvio» que el contexto «extremadamente hostil y arbitrario» contra Assange le ha terminado afectando.
Mediante un comunicado se informó: Además de los problemas físicos, Assange mostraba todos los síntomas típicos de una exposición prolongada a la tortura psicológica, entre ellos un estrés extremo, una ansiedad crónica y un intenso trauma psicológico».
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