En el municipio de Zapopan, Jalisco, se desarrolla una de las excavaciones más estremecedoras del año tras el hallazgo de una fosa clandestina en una zona residencial en desarrollo. Hasta la fecha, las autoridades han exhumado 34 cuerpos y recuperado al menos 169 bolsas con restos humanos, lo que convierte este sitio en la fosa más grande registrada en México durante 2025.
El fiscal del estado, Salvador González de los Santos, confirmó que ya se han identificado 17 víctimas y que los trabajos continúan con herramientas especializadas como georradares, varillas, binomios caninos y equipos de detección para asegurar la localización de restos enterrados. Según sus declaraciones, se encuentran en la etapa final del proceso de recuperación, aunque ha sido una tarea especialmente ardua debido a la magnitud de los hallazgos.
Una de las líneas de investigación más fuertes apunta a la desaparición forzada como posible origen de este crimen masivo, lo cual refleja la gravedad del fenómeno en la región. Zapopan, parte del área metropolitana de Guadalajara, ha sido escenario recurrente de este tipo de hechos en años recientes, con fosas que contienen decenas de víctimas aún no identificadas.
El hallazgo ha puesto nuevamente en el foco nacional la crisis forense y de desapariciones en México, especialmente en Jalisco, estado que lidera las cifras oficiales de personas no localizadas. Las autoridades continúan procesando la escena y notificando a familiares de personas desaparecidas ante la posibilidad de que alguno de los restos pertenezca a sus seres queridos.
La comunidad y organizaciones de derechos humanos exigen respuestas y medidas urgentes para frenar la violencia y garantizar justicia a las víctimas. El caso permanece bajo investigación y se esperan nuevos avances en los próximos días.