El sádico estaba condenado a la inyección letal pero se ha visto favorecido por un cambio en la legislación de Florida.
Joseph Smith, que en 2004 secuestró, violó y asesinó a la colegiada Carlie Brucia, de 11 años, ha sido favorecido por un cambio legal en Florida para eludir la pena capital a la que fue condenado por el crimen cometido.
En la grabación captada por cámaras de una gasolinera, se aprecia cómo el hombre, que entonces tenía 37 años, se lleva a Brucia cuando volvía a casa de la escuela en Sarasota. Más tarde, la niña fue encontrada muerta en un bosque detrás de una iglesia en esa misma ciudad.
Smith, que acumulaba un largo historial criminal de agresiones violentas, fue condenado a muerte por un jurado popular. La ejecución debía llevarse a cabo por medio de una inyección letal.
Sin embargo, el asesino podría salvarse debido a que Florida ha cambiado recientemente su legislación, de tal forma que un jurado debe votar por unanimidad para condenar a un acusado a pena de muerte.
En el caso de Smith, el voto fue de 10 a 2 a favor de la pena capital.
El juez anuló oficialmente la sentencia de muerte y ahora los fiscales de Florida tendrán que buscar una nueva condena a muerte en otro juicio, debido a que la nueva ley de sentencia se aplicó con carácter retroactivo.