Este fin de semana, la noticia de la salida del aire en todo el mundo de los programas de Chespirito como El chavo del 8 conmocionó al público y generó tendencia en las redes sociales, pues luego de 47 años de transmisión del emblemático programa, un tuit de Roberto Gómez Fernández, el heredero del emporio, informó el final de las emisiones.
“Aunque tristes por la decisión, mi familia y yo esperamos que pronto esté Chespirito en las pantallas del mundo. Seguiremos insistiendo, y estoy seguro que lo lograremos”, escribió en su cuenta.
Con esta noticia, el programa de habla hispana más famoso del mundo que ha llegado a públicos de múltiples países de Latinoamérica y algunos de habla no hispanohablante como Brasil, dejará de aparecer en las pantallas.
Pese a que no se ha difundido información que profundice en el tema y no existe un comunicado oficial, los motivos apuntan a una disputa por los derechos de la serie, sus transmisiones y sus personajes, entre Televisa, la cadena mexicana encargada de impulsar la carrera de Roberto Gómez Bolaños y sus productos a través de las décadas, y la familia Gómez.
En 2005, con la creación de un ente legal llamado Grupo Chespirito, la televisora logró un acuerdo inicial con el dramaturgo para continuar con las transmisiones en todos los países a donde llegaba la serie; siendo que en 2014, año en que Gómez Bolaños perdió la vida, que Televisa tuvo la libertad de comercializar la marca de El chavo con empresas como McDonald’s, Kellogg’s y Bimbo.
Ya en 2015, en alianza con Maca Rotter, otrora ejecutiva de Televisa Consumer Products, y quien creó su propia firma, Grupo Chespirito –ya liderado completamente por Roberto Gómez Fernández- comenzó la promoción de productos con licencia de los populares personajes.
Fue así que en 2017, el heredero de Chespirito decidió tomar las riendas de la comercialización y despedirse de su alianza con Televisa en el rubro de productos de consumo como juguetes, indumentaria y aplicaciones para dispositivos móviles.
Dicho nuevo acuerdo no constituyó que Televisa dejara de poseer los derechos del programa El chavo del ocho, que según Forbes habría aportado USD 1,700 millones a la empresa liderada por Emilio Azcárraga Jean; cabe destacar que tanto Grupo Televisa como Grupo Chespirito desmintieron la jugosa suma en su momento.
La negociación entre Televisa y Roberto Gómez Fernández no habría llegado a una resolución satisfactoria entre ambas partes luego de que el contrato habría terminado al finalizar julio, según expresó el actor Édgar Vivar.
Pese a que Televisa sigue teniendo la propiedad de todo el material grabado, de no renovarse el contrato se abriría la posibilidad de realizarse nuevos proyectos en otras plataformas y formatos, con la intención que tiene Grupo Chespirito de llevar a sus personajes a nuevas generaciones y horizontes.
Así lo explicó el actor detrás de emblemáticos personajes como Ñoño y El Señor Barriga: “Roberto Gómez Bolaños tenía apalabrado, contrato de por medio, el usufructo de los derechos de los personajes y de su creación literaria hasta el 30 de julio de este año. Casi 6 años después de su muerte y no se renovaron esos derechos, la empresa Televisa no quiso pagar”.
Según las apreciaciones del actor, la empresa Televisa ya no habría visto como un negocio rentable la transmisión de los programas, motivo por el cual no se renovó el contrato con la familia del actor fallecido en 2014.
De acuerdo a Vivar, esta situación propició que la totalidad de los derechos hayan regresado a los herederos de la familia, siendo que aún no hay una resolución definitiva.
“Por un lado pienso que esto es bueno porque va a dar oportunidad de renegociar algo, un negocio que le ha dado a la empresa Televisa muchísimos millones de dólares, muchísimo dinero que, hablando por mí como intérprete y parte del programa, gran parte de ese dinero nunca lo vimos nosotros. Qué visión y qué inteligencia de Roberto de ponerle un plazo a esto”, expresó.
Netflix
Ya es hora de nuevos programas lo mismo aburre