Abreu acompañó al FMLN en varios momentos decisivos de su historia, desde antes, durante y después de la firma de los Acuerdos de Paz.
El miembro del Partido Comunista Cubano, PCC, Ramiro Abreu, falleció este martes según lo dieron a conocer dirigentes del FMLN, que lamentaron la partida del dirigente.
“Ramiro Abreu, revolucionario cubano, gran amigo del pueblo salvadoreño y de nuestro partido FMLN, nos ha dejado físicamente. Nuestra solidaridad con su familia y el PCC. Descanse en paz”, escribió Norma Guevara.
Ramiro J. Abreu Quintana, nació en Las Villas, Cuba, en 1942.
Estuvo cerca del FMLN y de otros partidos de izquierda de todo el continente.
En septiembre de 2004, durante una de sus visitas a este país, expresó “yo amo profundamente a este pueblo (El Salvador), su historia, su cultura, su rebeldía, su laboriosidad, y lamento que tanto salvadoreño tenga que emigrar hacia otras partes en busca de empleo, esos hermanos pasan muchos sacrificios por su necesidad de ganarse la vida”, dijo, en un momento en el que gobernaba la derecha con el partido Arena.
Para Arena sin embargo, no pasaba de ser un “conspirador” enviado por la inteligencia cubana “para desestabilizar el país”, y sus visitas siempre dieron de qué hablar aunque era capaz de sentarse a dialogar con personajes de la derecha nacional como Gloria Salguero Gross, Murray Meza e incluso con el mayor Roberto d’Aubuisson.
Durante el primero gobierno del FMLN “aconsejó” al presidente Mauricio Funes, quien al conocer la noticia de su muerte expresó “lamento el fallecimiento de Ramiro Abreu, un revolucionario ejemplar, soldado de la revolución cubana y amigo del pueblo salvadoreño, que trabajó arduamente por el restablecimiento de las relaciones entre ambos países. Fui amigo de él y agradezco sus consejos y enseñanzas”, manifestó Funes.
Abreu fue diplomático, licenciado en Derecho Administrativo, Historia y Sociología, y doctor en Ciencias Históricas, graduado de la Academia de Ciencias de Moscú.
Se alistó en el Ejército Cubano hasta 1962 y participó en los combates de Girón como artillero antiaéreo, según su reseña. Luego fue diplomático cubano en Chile y México, además de cumplir misiones internacionalistas en Angola. Desde 1976 se involucró en la realidad centroamericana operando como interlocutor en los procesos de entendimiento y concertación en los conflictos.