Donald Trump sufrió dos reveses este jueves en su intento de detener los recuentos de votos en estados clave. Las autoridades judiciales de Michigan y Georgia rechazaron las demandas presentadas por la campaña del presidente de Estados Unidos.
En Michigan la jueza Cynthia Stephens, del Tribunal de Reclamaciones, señaló que la demanda se presentó el miércoles por la tarde, pocas horas antes de que se contaran las últimas papeletas. Asimismo, indicó que la acusada por la campaña del mandatario, la Secretaria de Estado Jocelyn Benson, es la persona equivocada para demandar porque no controla la logística del conteo de las boletas locales.
La magistrada dijo que planea emitir un fallo por escrito el viernes.
Ayer por la tarde el jefe de campaña de Trump, Bill Stepien, pidió que se detenga el conteo argumentando que a la campaña no se le ha “dado acceso a numerosos centros de votación para observar el proceso de apertura de boletas y el conteo”.
En consecuencia, solicitó que se detenga el proceso “hasta que se conceda el acceso”. “También demandamos rever aquellas boletas que fueron abiertas y contadas mientras no tuvimos acceso. El presidente Trump tiene el compromiso de asegurarse de que los votos legales sean contados en Michigan y en el resto de los lugares”, agrega el documento.
La demanda se hizo cuando aún no se había confirmado el resultado final, pero tenía a Biden como favorito. Finalmente, el candidato demócrata se impuso por poco más de dos puntos en uno de los estados clave de esta elección.
Esta es la segunda demanda que ha perdido la campaña de Trump en sus intentos de desafiar el escrutinio en varios estados clave, tras la derrota de su querella en Georgia; aunque el equipo del presidente sí ha ganado su petición de ampliar su acceso a los lugares de escrutinio de votos en Pensilvania.
Por estas horas los el foco está puesto en Georgia, donde en las próximas horas se podrían conocer los resultados finales. Un final dramático podría definir la carrera para la Casa Blanca.
Las autoridades del estado, uno de los cuatro aún en juego entre Trump y Biden, confirmaron este jueves que quedan unos 50 mil votos para contar en el estado, mientras la ventaja del presidente republicano continúa reduciéndose.
Pese a los fallos adversos, quedan pendientes las demandas presentadas en Nevada y Wisconsin, otros de los estados clave en estas elecciones.
La campaña de Trump anunció este jueves la presentación de una querella en los juzgados del estado de Nevada para detener el cómputo de los sufragios al asegurar que se están contando “votos ilegales”.
Se trata de uno de los estados que todavía no han completado el escrutinio y que podría resultar definitivo para elegir al nuevo presidente de Estados Unidos.
Según las proyecciones de los medios estadounidenses, con el 86% de los votos contabilizados, el demócrata Joe Biden aventaja a Trump por menos de un punto porcentual.
En una rueda de prensa en Las Vegas en la mañana del jueves, la campaña del republicano aseguró tener pruebas de que en torno a 10.000 votantes que ya no residen en el estado votaron en él, una cifra superior al margen de victoria que por ahora tiene Biden sobre Trump y que por tanto podría ser decisiva.
Además, los republicanos también sostienen que en Nevada se están contabilizando sufragios de personas fallecidas.
El equipo de campaña también solicitó un recuento de los votos en Wisconsin, otro estado clave en el que Biden se impuso por poco más de 20.000 votos.
El miércoles Stepien indicó que “han habido reportes de irregularidades en varios condados que generan serias dudas sobre la validez de los resultados”. “El presidente está dentro del margen para realizar ese pedido (el recuento de votos) y lo haremos inmediatamente”, agregó.
Las leyes electorales de Wisconsin permiten realizar el pedido. Según el código procesal del estado, sólo pueden hacerlo los candidatos que tengan una diferencia menor a un 1% con respecto a aquellos emitidos por el ganador. Según el conteo, Biden obtiene hasta ahora el 49,57% de los votos, mientras que Trump recibió el 48,94%. La diferencia, entonces, es de 0,63%. Wisconsin realizó un recuento de votos en las elecciones de 2016. El cambio total fue de 131 votos.
Donde Trump sí ganó la demanda que realizó en las últimas horas es en Pensilvania, otro de los estados clave que aún no confirmó los resultados finales. El fallo de la Corte de la Mancomunidad estatal le permite a los observadores de su equipo de campaña supervisar más de cerca el conteo de votos. Sin embargo, no detiene el escrutinio ni invalida ninguna parte del cómputo que se ha hecho hasta el momento.
La orden judicial permite a los observadores de la campaña de Trump situarse a una distancia de menos de 1,8 metros (seis pies) de cualquier mesa donde se estuviera llevando a cabo el cómputo de votos, para supervisar mejor el proceso.
En Pensilvania, donde se espera que el escrutinio se alargue al menos hasta el viernes, Trump aventajaba a Biden por más de 120.000 votos con el 92% escrutado, aunque a primera hora del jueves aún quedaban por contar más de 700.000 sufragios y se espera que la mayoría favorezca al candidato demócrata.
Para lograr la reelección, el presidente republicano necesita ganar en todos los estados que quedan por confirmar los resultados: Nevada, Alaska, Pensilvania, Georgia y Carolina del Norte. A Biden, en cambio, le alcanza con ganar sólo uno de ellos para llegar a la Casa Blanca.
Que UTUALITO, las elecciones gringas las ha ganado NAIDEN